Garzon, atento al poder, "se coló" a empujones en el Vicente Calderon

Garzón, atento al poder, "se coló" a empujones en el Vicente Calderón
Elsemanaldigital.com

Currárselo, se lo curra. No hay sarao donde haya políticos de relumbrón donde no aparezca el juez estrella. Aunque esta vez en el Atlético-Barça salió estrellado. ¡Por el resultado!

23 de mayo de 2007. ¿Le puede gustar a un juez ser una estrella mediática? ¿Puede un magistrado correr tras los miembros del Gobierno de turno día tras día? La cuestión es que si hace unos años los ciudadanos desconocían por completo a los magistrados de la Audiencia Nacional, ahora, en cambio, se saben sus nombres casi como la alineación de la selección nacional de fútbol. Uno de los jueces que más sigue brillando en el firmamento de la judicatura es Baltasar Garzón.Y su trabajo le cuesta al juez estrella, dicho sea de paso. Hasta los oídos de Garganta Profunda ha llegado cómo Garzón se abrió paso este domingo "a empujón limpio", según diversos testigos, en un abarrotado palco del Vicente Calderón para arrimarse al ministro de Defensa, José Antonio Alonso, y al de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, que sufrieron viendo cómo el peor Atlético resucitaba al Barça. El equipo local se desintegró y acabó sufriendo la mayor goleada de su historia (0-6) en su campo. Se comprobó que la pelota no forma parte de su filosofía, porque intentó tenerla, pero no pudo. Más bien no supo y convirtió el palco en una caldera a presión. Desgraciadamente, también Alonso y Moratinos parecían ir camino del matadero. Es lo que tiene lucir palmito en el Calderón: que no siempre se puede utilizar el palco para mantener el contacto, porque a veces pintan bastos y hay que estar a las duras y a las maduras. Aunque todo puede ser casualidad, mentes malpensantes, no sin sorna, ya han puesto a engrasar la máquina y no descartan que se produzcan nuevas coincidencias en el futuro. ¿No? ¿De verdad? La fortuna es para el que la busca. En ello cree ciegamente Baltasar Garzón, que no pasa precisamente por ser hombre al que le guste el anonimato. Y eso obliga al juez a hacer bolos por los saraos donde se personen políticos de renombre.El Atlético de Madrid–Barcelona fue el penúltimo escaparate, por ahora, de un Balta que, está visto, no se desanima cuando se trata de lograr tener cerca, pero muy cerca, a aquellos que representan el Poder… o sus aledaños. Mañana o pasado habrá un nuevo capítulo de Garzón superstar. Y seguro que levantará la misma expectación que en la entrada de la casa de Paulina Rubio y Colate en los últimos días.