El PSN desafia la orden de Ferraz y acuerda pactar con Nafarroa Bai

El PSN desafía la orden de Ferraz y acuerda pactar con Nafarroa Bai

¿PRESIDENTE?
Queda ver ahora si La Moncloa permite a Fernando Puras pactar con Nafarroa Bai el gobierno foral.

La dirección de los socialistas navarros ha dado su visto bueno a un acuerdo con los nacionalistas, pese a que el mandato del PSOE era claro: dejar gobernar a UPN en minoría.

1 de agosto de 2007. Rebelión en el Partido Socialista de Navarra. Ya no de la militancia, sino de la propia dirección. La Ejecutiva del PSN -con Fernando Puras y Carlos Chivite a la cabeza- ha desoído la orden de Ferraz de dejar gobernar a UPN en minoría y ha dado esta tarde el visto bueno a un Gobierno de coalición con Nafarroa Bai e Izquierda Unida, según confirmaron fuentes del partido. El acuerdo fue adoptado por unanimidad, pero deberá contar con la autorización de la dirección nacional del PSOE, que no está por la labor. Creen en Madrid que un acuerdo con los nacionalistas les perjudicaría seriamente en las elecciones generales. Incluso manejan encuestas internas que avalan con datos su temor.Los miembros del órgano de dirección navarro fueron citados este mediodía al encuentro. Según diversas fuentes consultadas, en los últimos días las tres partes han ido subsanando diferencias sobre la estructura del próximo Ejecutivo a través de contactos telefónicos -la última reunión la mantuvieron el 16 de julio- y quedan por resolver cuestiones "de matiz", aunque las mismas fuentes precisaron que no hay nada cerrado ni firmado. Tan avanzadas están las negociaciones con los de Patxi Zabaleta que ya se han repartido las consejerías: seis estarían ocupadas por políticos (dos para el PSN, además de la Presidencia, tres para NaBai y una para IU) y otras seis por técnicos independientes, cuyos nombres serán consensuados. Cierra un frente y abre otro mayorCon su decisión, Puras apaga un fuego pero enciende otro mucho mayor. Apaga el de la militancia y de muchos cargos públicos, que en los últimos días habían mostrado el malestar con su candidato -algunos incluso pidieron su cabeza- por doblegarse a los intereses de Ferraz en vez de pactar con Na-Bai e IU, como acordaron los socialistas navarros tras las elecciones. Pero a cambio enciende las iras de la todopoderosa dirección nacional del partido de la rosa, con los propios José Luis Rodríguez Zapatero y José Blanco a la cabeza. Pese a que desde Madrid se ha insistido siempre en que la decisión la tomaría el PSN, Ferraz ha presionado hasta casi ahogar a Puras y Chivite para que dejaran gobernar a UPN por el bien del partido a nivel nacional.Pese a este órdago en toda regla, la última palabra la tiene la dirección nacional. Según algunas fuentes Zapatero y Blanco no pasarán por un "aro" tan peligroso para sus intereses. Queda otra duda en el aire: saber que pasará con Puras, que ha lavado su imagen delante de "su gente" de Navarra pero a cambio se ha ganado los dos peores enemigos que puede tener dentro del PSOE.