Javier Moracho, Gay, atleta de segunda parte

miercoles 22 de agosto de 2007
Gay, atleta de segunda parte
POR JAVIER MORACHO
Tyson Gay, el nuevo «jefe» de la velocidad mundial, no se ha enfrentado en todo el año a Asafa Powell (y no sé por qué, pero creo que tampoco lo harán en Osaka por problemas físicos de alguno de los dos) porque se tienen pánico. Ni los 250.000 dólares para cada uno que ofreció el organizador de la reunión de Londres fueron suficientes para enfrentarlos.
Gay es un velocista que no tiene la técnica depurada ni la elegancia de Carl Lewis. Pero se parece a él en que corre muy bien las dos distancias, 100 y 200, y es muy bueno en velocidad lanzada. Los tacos de salida son su tortura y aunque pierda un poco de distancia respecto a otros atletas que salen con más fuerza explosiva, es en la segunda parte de la prueba cuando decide la carrera (a partir de los 60 metros en el 100 o en la salida de la curva en el 200). No es que Gay acelere como puede dar la sensación desde la grada, sino que mantiene mejor y durante más tiempo la velocidad de resistencia.
El Caribe no será para Gay un lugar de descanso y dormirá más tranquilo si se centra y cree en sus posibilidades. El descanso forma parte del entrenamiento invisible y también cuenta en estas pruebas, donde una centésima de segundo puede darte la victoria o bajarte del podio, como se vio en el Mundial de París 2003.