viernes, marzo 23, 2007

Ladron de Guevara, El Fascio transparente

viernes 23 de marzo de 2007
El Fascio transparente
Ernesto Ladrón de Guevara
H A irrumpido un germen de opción política de la mejor manera que puede surgir una iniciativa, que es mediante el análisis y reflexión sosegada y pacífica sobre la salud de nuestro sistema democrática. No entiendo por qué es un sacrilegio discernir respecto a si los partidos dan cumplimiento a su papel de canalizadores de la participación política de los ciudadanos o no. O si es legítimo que los grupos parlamentarios funcionen por mandato imperativo cuando está expresamente prohibido por la Constitución. O que cada escaño represente de forma disparatadamente desigual a los electores. Como tampoco puedo entender que sea dañino plantearse si se cumple algún punto de la Constitución o se ha vaciado de contenido. O sobre si la soberanía nacional -para no herir la sensibilidad de nadie dejémoslo en soberanía popular- es realmente soberanía o se la está usurpando. O si ese contrato social con los ciudadanos que es el programa electoral con el que concurren los partidos se guarda en un cajón para luego hacer cosas que no tienen nada que ver con las promesas electorales, como negociar con etarras y sacarlos de las cárceles cediendo a chantajes, o mantener tropas en una guerra como la de Afganistán, o hacer recortes de los derechos sociales como el de una jubilación digna a una edad meritoria con una financiación posible si no hubiera el despilfarro autonómico, etc. O si se posibilitara que los ciudadanos eligieran poniendo una cruz delante de los representantes que les cumplieran dignamente su tarea de delegación del mandato. O si se decidiera en las urnas cuestiones como la entrada en una guerra como la de Irak. O si se pusiera como condición para estar en tareas de gobierno el tener un mínimo de formación, aunque sólo sea una simple carrerita de tres años en alguna de nuestras mediocres universidades. O si los impuestos son proporcionales a las necesidades de los ciudadanos, etc, etc, etc. Pues por plantear eso un diario adicto a la escuela goebbeliana, (del famoso ministro de propaganda nazi) califica a ese grupo de reflexión política como “[...]surgida a la derecha del PP”. No hay nada más repugnante como la intoxicación informativa, pues se da abrazos con los sistemas educativos que manipulan las conciencias de los niños y jóvenes para lograr objetivos totalitarios. Esto me recuerda, también, una experiencia que he tenido no hace mucho. Edité un libro titulado “Educación y Nacionalismo” cuyo contenido cualquier mente perspicaz adivinará. La editorial era una conocida entidad privada del ámbito liberal que publicaba temas vascos con interés científico. Pues bien, no les digo por qué, a los seis meses de publicarse ese libro, esta editorial fue absorbida por otra de las que critico en “Educación y Nacionalismo” por deformar los contenidos de los libros de texto. ¿Casual o causal? ¿Y saben más?: Aún estoy a la espera de que me envíen una liquidación con la distribución y venta de ejemplares, puesto que el libro fue pagado religiosamente y sólo han vendido –dicen- 75 ejemplares. ¿Problemas de distribución o algo más deleznable? Así funciona eso que llamamos “Democracia” en algunos lares. Y luego resulta que los que somos de extrema derecha somos los demás.

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