El heterodoxo "pepero" Lassalle provoca un maremoto en Génova

GARGANTA PROFUNDA
El heterodoxo "pepero" Lassalle provoca un maremoto en Génova
Elsemanaldigital.com

Por si su matrimonio con una diputada socialista catalana no era suficiente para que algunos le tachasen de ir con el paso cambiado, ahora se echa en los brazos de Polanco.

5 de marzo de 2007. El inminente estreno del diputado del PP, José María Lassalle, hombre de confianza del líder, Mariano Rajoy, e ideólogo del partido, como columnista del diario El País, promete levantar ampollas en círculos populares. "Definitivamente, Lassalle parece haber caído rendido ante los encantos del Grupo Prisa, tal vez empujado por su señora esposa", señalan algunas fuentes populares del edificio de la gaviota azul de la calle Génova, aunque también podían pensar que se sacrifica por conquistar para los populares electores aún no convencidos, tal como pide Rajoy. En fin, que cada cual piense como quiera. Lassalle fue noticia en su día por su matrimonio con la joven diputada del PSC, Meritxell Batet. La atención de los medios festejó la novedad de la unión entre personas ideológicamente tan apartadas como un santanderino liberal que vive y trabaja en Madrid y una socialista según la ortodoxia catalana. Pero ambos comparten otras muchas cosas como el perfil profesional de doctores en Derecho y profesores de Universidad. Mientras que Batet es profesora de Derecho Constitucional en la Pompeu Fabra, Lassalle enseña Sistemas Políticos Comparados en la Universidad San Pablo CEU y se encargó de impartir Filosofía del Derecho en la Universidad de Cantabria y en la Carlos III de Madrid."Desde El País me han hecho una oferta económica difícilmente rechazable". Es, al parecer, la justificación de José María Lassalle ante sus amistades, según cuentan precisamente en su entorno a Garganta Profunda. Justificación, por cierto, correctamente liberal. Con todo, quien se encarga en gran medida de la redacción de muchos de los discursos del presidente del PP, su nuevo papel en PRISA, provocará de manera inevitable sarpullidos y escoceduras en sectores del partido. Decisión por tanto arriesgada donde las haya que se supone habrá sopesado largamente.José María Lassalle ha sido siempre uno de los diputados más visibles en la lucha dentro del grupo parlamentario popular por evitar que los diputados más clericales de su partido impongan el voto en asuntos que más tienen que ver con la moral individual que con la política. Diputados, por cierto, que han solicitado por ejemplo la libertad de voto en el Partido Popular en la cuestión de los matrimonios entre homosexuales. Fuentes oficiosas de hecho le retratan diciendo que "ya estaba harto de injerencias de la Iglesia en el partido", que "los diputados católicos no nos impongan sus principios morales a los demás", y que él tenía "conciencia laica y alma laica". Toda una declaración de principios.