Alvaro Vermoet Hidalgo, ¿Parte de la solucion o parte del problema?

jueves 28 de junio de 2007
Consejo Escolar del Estado
¿Parte de la solución o parte del problema?
Se debatirá sobre Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos como si realmente fuera una asignatura y no un absurdo intento de enseñar como verdades esos mitos progres que conforman la corrección política y el pensamiento buenista
Álvaro Vermoet Hidalgo

Este jueves se debate en el Consejo Escolar del Estado el Informe anual sobre la situación del sistema educativo. O eso dicen. La verdad es que lo que se aprueba es una compilación de agregados estadísticos con recomendaciones que ahondan en las ideas que han llevado a España a los peores datos de fracaso escolar de su historia. Eso sí, un fracaso escolar carísimo porque los y las consejeros y consejeras han concluido que cuanta más riqueza se crea en España, es decir, cuanto más sube el PIB, más hay que invertir (ojo, no gastar) en la enseñanza.
La Administración, los sindicatos, las patronales y las asociaciones no hablarán mañana de disciplina, de esfuerzo o de autoridad, sino de subvenciones, gasto público y participación. Eso que llaman comunidad educativa no propondrá aumentar el nivel de exigencia, un Bachillerato más largo, la vuelta a las reválidas, adelantar una alternativa de Formación Profesional a los 14 años o el cheque escolar. Sólo pedirá más dinero al contribuyente para gastarlo en subvenciones a asociaciones, en cursillos de formación didáctica y en congresos sobre técnicas para motivar al estudiante.
Ese jueves podrán comprobar los lectores de Libertad Digital que quienes dicen representar a padres, profesores y alumnos debatirán sobre la LOE como si verdaderamente fuera una reforma educativa, ignorando que su único fin fue borrar todo rastro de los ocho años de gobierno del Partido Popular. Se debatirá sobre Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos como si realmente fuera una asignatura y no un absurdo intento de enseñar como verdades esos mitos progres que conforman la corrección política y el pensamiento buenista.
Por cierto, que esa "área de conocimiento" de ocho palabras tiene el privilegio de ser la única materia que el alumno debe aprobar si quiere acceder a un título oficial. Nosotros propondremos actividades de voluntariado como la mejor educación cívica posible, pero es de suponer que la "comunidad educativa" preferirá que se enseñe algo así como la feminización de la pobreza o el Estado del Bienestar. Eso si no toca huelga de estudiantes, la otra gran aportación de la Ley de Zapatero.
Pero lo fundamental es que los últimos tres años de Gobierno del PSOE han servido para paralizar las medidas de la Ley de Calidad del PP sin las cuales el sistema educativo no será capaz de atender a las necesidades formativas de los jóvenes y, por tanto, de hacer de España un país competitivo. No se criticará en el Consejo Escolar al Gobierno por suprimir una Prueba General al final del Bachillerato, el más corto de Europa, o por suprimir las distintas vías de estudio en la enseñanza secundaria en un país donde uno de cada cuatro estudiantes no llega al título más elemental.
No se criticará porque todo eso va en contra de su idea, su dogma, su secta; ese igualitarismo progre del nada para todos que pretende hacer de la enseñanza un instrumento de igualación y no de aprendizaje. Fracaso escolar habrá, pero eso sí, será un fracaso equitativo, progresista y paritario. Y mientras tanto debatiremos sobre la interculturalidad, la democratización asamblearia de la escuela y la "equidad"; es decir, en el Consejo Escolar ahondaremos en las recetas del fracaso.
Álvaro Vermoet Hidalgo es presidente de la Unión Democrática de Estudiantes y consejero del Consejo Escolar del Estado y del Consejo Escolar de la Comunidad de Madrid.