ZpM se olvidó de lo que cuesta un café

La teoría impecable, pero Zapatero se olvidó de lo que cuesta un café
Elsemanaldigital.com

ZP tira de su "negro" favorito para afrontar el reto en televisión
TVE estrenó por todo lo alto "Tengo una pregunta para usted", en el que por primera vez un presidente del Gobierno se sometía en directo a las preguntas de los ciudadanos.

28 de marzo de 2007. Muchos datos, muchas cifras, muchas leyes y encuestas... José Luis Rodríguez Zapatero había hecho los deberes para enfrentarse al examen en directo de los ciudadanos en TVE. A modo de aula magna universitaria, parecía que el presidente del Gobierno se enfrentaba a los exámenes de selectividad para acceder a la Universidad. Pero con cien profesores anónimos delante. Hincar los codos, Zapatero los hincó bien. Se sabía de memoria todos los datos y cifras habidos y por haber para contestar en directo a las 100 preguntas que los ciudadanos le iban a hacer por primera vez a un presidente del Gobierno en los Estudios Buñuel de Madrid. Se trata del recién estrenado programa Tengo una pregunta para usted, coordinado por Lorenzo Milá. El siguiente en pasar por el test ciudadano en directo será Mariano Rajoy a mediados de abril.La teoría de Zapatero impecable, pero la práctica... ay, la práctica. Pocas veces contestaba con soluciones directas a los problemas reales de la gente. De hecho, cuando Jesús, de Pamplona, le preguntó cuánto costaba un café en la calle, el presidente le contestó que 80 céntimos. Tampoco pareció convencido el joven David, de Barcelona, quien le preguntó sobre el problema de la vivienda y tras responderle el presidente le aseguró que seguía igual que antes y que con sus estadísticas, él seguía sin poder comprarse un piso.Zapatero, ataviado con sobrio traje gris marengo, y con una silla al más puro estilo monologuista detrás (que no utilizó en las dos horas que duró el programa), se desplazaba a izquierda y derecha del atril según por donde le llegara la pregunta para apabullar con sus cifras y datos a los "preguntones" ciudadanos, que se dirigieron al presidente sobre vivienda, inmigración, educación, salud, situación de los autónomos, etc.En general, muy poca chicha y poca polémica. Debido a las "cosas del directo" había que ir rápido y los allí presentes casi ni replicaban. Se limitaban a hacer gestos de impotencia ante las explicaciones de Zapatero, que sacó a relucir en dos horas todas las "maravillas" de su Gobierno y a explicar que la mayoría de las cosas malas ("tiene usted toda la razón", decía a los que preguntaban) se debían al estado en que encontró las cosas cuando llegó a La Moncloa. El formato, si no cambia con Rajoy, se volvió soporífero en poco tiempo, a pesar de que empezó fuerte con preguntas sobre ETA, Iñaki de Juana Chaos y la claudicación del Gobierno ante el chantaje terrorista. Sólo pareció despertarse a la vuelta de publicidad con varias preguntas sobre Navarra y el órdago lanzado por Arnaldo Otegi, pero con su "talante" habitual, Zapatero volvió a "dormir" el programa y, quizá a parte de los telespectadores. Una lanza a favor de AznarEntre las pocas cosas que sacaron en claro los "preguntones", que Zapatero no es partidario de que a José María Aznar le juzgue el Tribunal Penal Internacional por a la guerra de Irak, y que Navarra, de momento, seguirá siendo España. En este punto, la mujer que se interesó por el tema preguntó a Zapatero si eso ya se lo había comentado a Otegi.La próxima cita será a mediados de abril y el que tendrá que vérselas con los ciudadanos será el líder de la oposición que, como hizo Zapatero, puede aprovechar la oportunidad para dar por iniciada la campaña electoral a las generales de 2008. En esta ocasión las 100 preguntas se quedaron en 42. Veremos cómo se las arregla Lorenzó Milá para alcanzar la cuota de las 100. El presidente juega con ventaja, pues invitó a los presentes que no tuvieron la oportunidad de preguntar a dirigir sus cuestiones a La Moncloa. Quizá Rajoy haga lo propio en la calle Génova.