Jaime Pañafial, ¡Miedo me da! cuando ella sea Reina

viernes 7 de septiembre de 2007
¡Miedo me da! cuando ella sea Reina Jaime Peñafiel

Después de diez años, la pobre Camilla ha vuelto a ser humillada, públicamente, por la familia Windsord y por el 91% de los británicos, después de que el 74% de ellos hubieran aprobado su polémico matrimonio con el Príncipe de Gales que la ha convertido en duquesa de Cornualles y futura Reina consorte de Inglaterra. Como Letizia de España.
Pero hoy, como hace una década, se ha visto obligada a huir de Londres, a quitarse de en medio, a esconderse.
En 1997 lo hizo en Granada. En el 2007 en Escocia. En ambas ocasiones por el mismo motivo: Diana, siempre Diana.
Si la desaparición de Camilla cuando los funerales de Lady Di fue por propia decisión (aquel día su vida, ante la histeria colectiva de dolor, peligraba), en ésta ocasión la han obligado.
Ni la Reina, ni algunos consejeros del Príncipe Carlos, ni muchos amigos, deseaban su presencia en el acto religioso en memoria de quien fue su antecesora, la Princesa de Gales.
Y se lo hicieron saber cuando ella ya había anunciado su presencia porque su esposo y los hijos de éste se lo habían pedido.
Pero horas antes del servicio religioso le comunicaron que no podía ir.
Hasta aquí, toda la razón para Camilla por la innecesaria humillación recibida y que la ha convertido, de nuevo, en la enemiga pública del Reino Unido.
Al regreso de Escocia, la duquesa de Cornualles tuvo una violenta discusión con los asesores del Príncipe Carlos y miembros del Palacio Real, que le habían hecho llegar a su esposo, hasta convencerle, lo inadecuado de la presencia de su esposa en el funeral por Diana. ¡Diana, siempre Diana!
Humillada, ofendida y fuera de sí, pronunció unas palabras que nunca debería haber dicho, según el semanario News of the World: “Esperad sólo a que yo sea Reina”.
Es la ira de las conversas y de las advenedizas. Que nunca olvidan. Por suerte para mí, cuando ella sea Reina (¿?) yo ya no estaré para verlo.
Pero miedo me da. Hablamos, por supuesto…, de Camilla.