Una manifestaciones que solo dividen y crean confusion

Unas manifestaciones que sólo dividen y crean confusión
Elsemanaldigital.com

12 de enero de 2007. Hay polémica en la política nacional por la convocatoria de manifestación en Madrid, a la que el próximo sábado el Partido Popular no podrá asistir porque algunos de los convocantes se negaron a pedir en las calles "libertad" además de "paz". El PSOE de José Luis Rodríguez Zapatero, en este caso a través de la UGT de Cándido Méndez, ha querido dejar fuera de la manifestación contra ETA al PP de Mariano Rajoy. Pero tampoco asistirán las víctimas del terrorismo, y realmente es el Gobierno quien parece cada vez más aislado, dividido y perplejo.Pero los acontecimientos de la capital no deben hacer olvidar el lugar donde la división es más evidente y más lamentable. El lendakari Juan José Ibarretxe convocó hace unos días una manifestación en Bilbao, también el sábado 13 de enero, con el lema Por la paz y el diálogo. Desde el principio el Partido Popular vasco anunció que no podría adherirse a la convocatoria, ya que el "diálogo" con los terroristas no forma parte de una política antiterrorista, sino que es la opción política del PSOE y del PNV. El Gobierno tripartito vasco, formado por PNV, IU y EA, no mostró ninguna intención de modificar el lema para lograr la unidad de las fuerzas opuestas a ETA. La presencia del PP no parecía ser imprescindible para los convocantes.A continuación, Batasuna –que legalmente no existe, y si existe es una parte de ETA- anunció su adhesión a la manifestación "para decir sí al proceso y sí a una solución democrática". Los portavoces batasunos Pernando Barrena, Joseba Permach, Joana Regueiro e Imanol Iparragirre, partidarios de "un mensaje en favor del proceso de resolución dialogado y negociado", subrayaron su satisfacción con el lema y objetivos de la convocatoria de Ibarretxe.Acto seguido, el secretario general del PSE, Patxi López, anunció que los socialistas vascos podrían retirar su adhesión a la manifestación si el lema elegido por el Gobierno autonómico hacía participar a Batasuna. López pidió al lendakari que modificase el lema para que se evidenciase el rechazo al terrorismo; de ese modo, según López, el PSE podría asistir, y en caso de hacerlo Batasuna lo haría "condenando" el terrorismo. Sin solución de continuidad, el portavoz del PNV en el Congreso de los Diputados, Josu Erkoreka, ya explicó que para su partido Batasuna debía explicitar su rechazo a la violencia.En consecuencia, Ibarretxe decidió ayer jueves alargar el lema de la manifestación con Exigimos a ETA el fin de la violencia. Ibarretxe ha invitado tanto al PSE como a Batasuna a que se identifiquen con el nuevo texto de la convocatoria, y que se unan a él en las calles de Bilbao. Para el líder nacionalista, su propuesta es un "punto de encuentro" en el que, según sus propias declaraciones, "todos" deberían caber. Al margen de lo que hagan unos y otros en las horas que faltan hasta la manifestación, lo más notable es la marginación del partido Popular y el olvido de los objetivos del Pacto Antiterrorista.Para el PSE se han abierto las puertas que antes se cerraron para el PP vasco. Conviene recordar que los convocantes de la manifestación de este sábado en Bilbao se negaron a atender la petición popular para modificar el lema de la convocatoria, aunque para muchos vascos el "diálogo" con ETA no es democráticamente admisible, y en todo caso no es un objetivo por el que quieran manifestarse. Han bastado las reticencias de Patxi López sobre la posible presencia de Batasuna en la manifestación para que el entorno de Juan José Ibarretxe se muestre dispuesto a modificar lo que antes era intocable. El PNV quiere tener a su lado a socialistas y batasunos, pero no al PP, que sigue representando a diez millones de españoles.