Benditos especuladores

Benditos especuladores
Lorenzo Bernaldo de Quirós

29 de enero de 2007. E.On dice que no se dejará influir por la "especulación" en su oferta sobre Endesa. Los especuladores gozan de una mala fama injustificada. Quienes realizan esa benemérita actividad suelen poner de manifiesto que el valor de una empresa es superior al que refleja el mercado en un momento determinado. De hecho, todas las opas son operaciones especulativas. Quienes la lanzan perciben que pueden obtener beneficios potenciales y se arriesgan a realizar esa operación. Si aciertan, ganan plata y si no, la pierden. Esta lógica "especuladora" proporciona beneficios a todos. Los accionistas, pequeños, medianos y grandes logran que sus inversiones les sean más lucrativas. ¿A quiénes perjudican las actividades a los supuestos especuladores? A los malos gestores que no maximizan el valor de las empresas. Sin la "especulación", la cotización de Endesa quizá seguiría instalada en los 16-18 euros acción. La entrada de E.On sirvió para que los títulos de la eléctrica cotizasen al alza, y la posterior de Acciona fue determinante para que las acciones de la corporación liderada por Pizarro se situasen en los contornos de los 40 euros. ¿A quién han favorecido esos supuestos movimientos especulativos? A todos los individuos e instituciones que han visto incrementarse el valor de su inversión en Endesa. Ellos son los verdaderos ganadores de toda la pelea entre los distintos jugadores que se han disputado y se disputan la adquisición de la primera eléctrica española. Es obvio que los gestores de E.On estén molestos. Pretendían quedarse con Endesa, primero por 24,5 euros/acción, después por 34, y ahora la operación les va a salir más cara. Si no se dejan "influir" y mantienen su apuesta en los términos en que la realizaron hace unos meses no conseguirán sus objetivos. Nadie les venderá sus participaciones en la eléctrica a un precio inferior al que ahora cotiza en el mercado. Desde esta perspectiva, Herr Bernotat tendrá que ofrecer más. De lo contrario perderá la partida y él lo sabe.