Santiago Gonzalez, Parrilla o brasa

martes 23 de enero de 2007
Parrilla o brasa
SANTIAGO GONZÁLEZ

Tenían que elegir entre la sartén o el fuego. O entre la parrilla y la brasa, por referirnos a técnicas de cocina que nos son más próximas. Los 578 compromisarios de Eusko Alkartasuna al congreso extraordinario celebrado el domingo en el palacio Euskalduna de Bilbao votaron mayoritariamente por presentarse en solitario a las próximas elecciones municipales.La disyuntiva alkartasuna es comprensible. Desde que la retirada de Carlos Garaikoetxea removió el obstáculo para ese sueño de unidad que dice tener todo nacionalista, aunque lo practique tan poco, la rama volvía a unirse al tronco por razones electorales en los comicios autonómicos y municipales.Todo en esta vida tiene pros y contras. A favor de la coalición hay que contabilizar un número no desdeñable de cargos representativos que nunca habrían obtenido con sus votos, y no sólo por el castigo que la ley d'Hont inflige a los partidos pequeños. Gracias al acuerdo con el partido guía, los candidatos alkartasunos ocupaban en las listas mejor puesto del que les correspondería en virtud de sus votos. Así han obtenido 37 concejales más que la última vez que concurrieron en solitario y tres escaños más en el Parlamento vasco de los cuatro que les atribuían las encuestas.No son ventajas despreciables, pero no quieren ser la Unió de esta Convergencia y se han plantado. No están dispuestos a dejarse absorber lenta e inexorablemente por la poderosa maquinaria del PNV de Imaz. Y del otro, naturalmente (ustedes perdonarán, pero es mucho lo que tira el sintagma). El sector oficial considera que el asunto está zanjado y anuncian que el partido sale reforzado de este debate. Ni una cosa ni otra. El debate lo ha reabierto el alcalde de Salvatierra, un histórico con bastantes años al frente del Ayuntamiento de la cuarta población de Álava, que anuncia su decisión de no concurrir a las elecciones de mayo en una lista de EA en solitario. No sería extraño verlo encabezar una lista independiente impulsada por el PNV, si ustedes me admiten la paradoja.. Tampoco que lo siguieran otros. Y si en mayo se pierde un número considerable de concejales y alcaldes, será malo y aumentarán el lío interno y las deserciones. El efecto descalabro puede ser tanto mayor si finalmente Batasuna puede concurrir a los comicios bajo alguna fórmula que, hoy por hoy, no se le alcanza al presidente del Gobierno, según confesión propia. Pero peor será en las autonómicas, cuando se vean convertidos en un partido con una representación parlamentaria similar a Ezker Batua y el PNV les haga saber que les corresponde una consejería, como a Madrazo.Han querido poner freno a la absorción gradual, pero no hay manera de saber si hay un espacio sociopolítico para EA, tan lejanos ya los tiempos de Garaikoetxea, los 13 parlamentarios en Vitoria, las alcaldías de Cuerda y Albistur y la Diputación de Imanol Murua. Sic transit Gloria Mundi. Y Begoña Errazti.s.gonzalez@diario-elcorreo.com