Solbes sigue sin ver llegar la hora de plantar a ZpM

GARGANTA PROFUNDA

Pedro Solbes sigue sin ver llegar la hora de "plantar" a Zapatero
Elsemanaldigital.com

Su compromiso con el presidente del Gobierno fue sólo por dos años. Pero cuando recuerda que su tiempo ha pasado ya, el inquilino de La Moncloa se hace el despistado.

9 de enero de 2007. Los economistas más o menos cercanos al Partido Popular recibieron con alborozo la renuncia de Pedro Solbes a su cómoda posición de comisario en Bruselas y su vuelta a Madrid para hacerse cargo del Ministerio de Economía y Hacienda en el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Con alborozo porque pensaron que su presencia implicaba que Zapatero no iba a hacer ninguna locura con la Economía.Para Solbes no era una tarea fácil sustituir al dúo Rato-Montoro, fundamentalmente porque las cosas que van bien es difícil que puedan ir mejor, y el riesgo que en esas condiciones se asume reside en que un día se invierta la tendencia y comiencen a ir peor. Con Pedro Solbes han continuado yendo relativamente bien, dentro de la pauta establecida por los Gobiernos de José María Aznar, aunque los desequilibrios de nuestra economía siguen engordando hasta alcanzar magnitudes que comienzan a inquietar, tal que el déficit exterior.Ahí el vicepresidente económico, así como en otras reformas necesarias, no ha movido ni un dedo. Pero ocurre que Solbes sólo piensa en la hora de irse, según cuentan fuentes solventes a Garganta Profunda. De hecho, su compromiso con Zapatero fue para dos años, media legislatura. Sin embargo, el jefe del Ejecutivo se niega a desprenderse de él. Y aunque, siempre según las mismas fuentes, Pedro Solbes le ha vuelto a recordar al presidente del Gobierno su voluntad de retirarse, la respuesta ha sido la esperada: tendrá que aguantar hasta el final de la legislatura.Ante la legislatura de Zapatero, con todo tipo de frentes abiertos, Solbes es para él una especie de "último cartucho". Pero ¿se atreverá el valenciano a plantarse en algún momento ante el leonés y decirle algo tan sensato como "yo por aquí no paso" o, como la mayor parte de los consultados barruntan, seguirá la senda de los corderos? No son los problemas económicos los que aprietan el pie de Pedro Solbes, con un retiro más que sustancioso por delante como ex comisario de la UE, y a él, como a tantos otros, sólo debería importarle su conciencia o eso que algunos llaman autoestima.