Tonia Etxarri, Carnaval en el Congreso

miercoles 21 de febrero de 2007
Carnaval en el Congreso
TONIA ETXARRI
Se nota el calendario. Estamos en tiempos de máscaras y el Congreso de los Diputados no se libra de la tiranía del tiempo de fastos. También al hemiciclo, el escenario de la palabra, del diálogo y el contraste de pareceres, ha llegado el disfraz. Porque no toca hablar de ETA, salvo cuando quiera el presidente, no toca pedir la ilegalización de los grupos satélites del entorno de ETA, salvo cuando lo considere oportuno el presidente, no queda políticamente correcto exponer las dudas, fundamentadas por cierto, acerca de que las Comunistas de las Tierras Vascas le estén haciendo el trabajo al grupo de Otegi, a menos que el presidente decida que es pertinente el planteamiento.Total, que en lo que a la lucha contra el terrorismo se refiere, no hay nada de qué hablar en el Parlamento. Sencillamente porque el Gobierno de Zapatero está más centrado en el proceso de negociación con la banda terrorista que en su persecución. Es una opción. A falta de transparencia, todo son sospechas y de lo que nadie tiene ya duda es de que el Ejecutivo socialista no tiene intención alguna de poner dificultades al entorno de la ilegalizada Batasuna («a partir de ahora, Izquierda Abertzale», según el auto del juez Garzón) para que pueda presentarse a las próximas elecciones. Las municipales y las forales de Navarra. Así es que la persistencia del PP en pedir la ilegalización de las Comunistas de las Tierras vascas, que por cierto han actuado en el Parlamento vasco como auténticos 'clones' de Batasuna, resulta ya un incordio para los socialistas. Se pongan como se pongan los conocedores del fenómeno (cuando EHAK ganó los nueve escaños del Parlamento Otegi celebró la victoria electoral como propia; ellas anunciaron que su actividad se reduciría al Parlamento pero que la representación política se la cedían a Batasuna; de hecho en las rondas del lehendakari ha sido Otegi y no las 'nekanes' quienes han representado a la izquierda abertzale; en el último pleno en el que se condenó el atentado en Barajas, las representantes de esta formación se ausentaron, en el más puro estilo de Batasuna, para evitar tener que votar la declaración) al Gobierno de Zapatero no le consta nada de nada. Al ministro del Interior, idem de lo mismo: las Comunistas de las tierras Vascas irán en envase blanco y en botella, pero no tendrán nada que ver con la leche. Y si atendemos el criterio del Fiscal General, Conde-Pumpido, parece claro que nadie va a coger una lupa para observar el coladero por el que los compañeros de Otegi van a introducirse en las próximas listas electorales. La actitud del presidente Zapatero, al que le empieza a molestar demasiado la oposición no domesticada, se va pareciendo al lehendakari Ibarretxe cuando decía que los críticos con su plan no hicieran tanto ruido, que no crisparan. Al final, todo se contagia.t.etxarri@diario-elcorreo.com