Marcello, Cambio climatico en el PP

jueves 25 de octubre de 2007
Cambio climático en el PP

Marcello tiene una amiga, que es más lista que un lince y se llama Cheli, y que, además de ecologista diplomada y enamorada de la naturaleza y del mundo animal, es una joven encantadora, tradicional y centrista que, con seguridad, vota, o votaba, al PP. Pero Marcello está convencido de que la próxima vez, en marzo del 2008, al PP, o a Rajoy, Cheli y muchos de sus compañeros no los van a votar, como no lo harían los osos polares del ártico que están viendo cómo se derrite su ámbito natural. Porque lo que acaba de decir Rajoy, menospreciando el imparable cambio climático, es, además de una frivolidad por las formas utilizadas, un insulto a la verdad, la inteligencia, y al sentimiento de muchos españoles, y de una gran parte de la Humanidad.
Y no sólo porque lo diga Al Gore, a quien algunos políticos del PP y la chusma graciosa que escribe en los medios de comunicación de la derecha española ha denigrado hasta la saciedad, a pesar de ser persona de probado prestigio y credibilidad: ex vicepresidente de Estados Unidos, destacado líder del Partido Demócrata, premio Nobel de la Paz, Premio Príncipe de Asturias y Oscar de Hollywood al mejor documental. Incluso ha sido atacado Gore porque cobra caras sus conferencias —¿cuánto cobra Aznar por justificar la mentirosa, mortífera e ilegal guerra de Iraq?—, lo que es legítimo en una sociedad de libre mercado, en la que nadie está obligado a pagar.
La crisis del cambio climático es una cruda realidad, lo diga Gore o el lucero del alba, porque los riesgos que hoy se ciernen sobre el clima y el planeta son ciertos, algunos a la vista están, y otros son avalados por muchos y destacados científicos, aunque existan discrepancias sobre su ritmo y nivel de intensidad. Y ¿sobre esto tienen que hacer Rajoy y el PP una mofa desgraciada, con desprecio a las inquietudes de una mayoría de españoles —muchos votantes del PP— y a una imparable verdad? Y si a todo esto añadimos que semejante idiotez fue lanzada por Rajoy en precampaña electoral, pues todavía mucho peor.
No sería de extrañar que el PSOE de Zapatero utilice las impresionantes imágenes del documental de Gore en su campaña electoral, por su belleza y por su impacto social. Mientras que a Rajoy le quedará un oso de peluche —como el de nuestra composición gráfica— sobre una placa de hielo, en medio del ancho mar. ¿Y así piensa ganar el PP las elecciones en un tiempo en el que niega el cambio climático y dice que se está rompiendo España, lo que no se ve por ningún lugar? Con eso y con las críticas de Aguirre al Rey, los cantos renovados de Aznar a la guerra de Iraq, los vivas de Mayor Oreja al franquismo, o los de Zaplana a la conspiración del 11M. ¿Con este coro de gansos desafinados se va a presentar Rajoy en la campaña electoral?
Querida Cheli, no vayas a votar. La abstención, en estos casos, es un voto de castigo para todos los políticos y un ejercicio de la dignidad. Y ¡viva el lince!, pero en libertad.