El campo, de sobresalto en sobresalto

El campo, de sobresalto en sobresalto
Pedro Vicente

8 de febrero de 2007. Decididamente 2007 no ha empezado con buen pie para el sector agrario, que no hay semana que no se vea sobresaltado por alguna nueva amenaza.Al menos así está ocurriendo en Castilla y León, donde a las vacas flacas de la producción agropecuaria, se ha añadido la alarma desatada por la Ley "antialcohol" promovida por el Ministerio de Sanidad.La alarma en el sector del vino se ha producido cuando está todavía sin resolver el problema causado en Castilla y León por la reducción en unos 100 millones de euros de los Fondos de Desarrollo Rural procedentes de la Unión Europea. La petición del gobierno regional al Ministerio de Agricultura de que revise los criterios de distribución territorial de dichos fondos o, en su defecto, compense con otra aportación adicional su importante minoración, no ha dado hoy por hoy ningún resultado. Y mientras no lo haya, seguirá pendiendo una Espada de Damocles sobre los 44 grupos de acción local que operan en el vastísimo medio rural de esta comunidad autónoma.El cabreo existente en Castilla y León con la ministra Elena Espinosa por cuenta de dicho recorte de fondos agrarios se ha visto ahora incrementado a causa del anteproyecto de Ley contra el consumo de alcohol. Aunque la iniciativa corresponda a la ministra de Sanidad, Elena Salgado, viticultores y bodegueros achacan a Espinosa una manifiesta falta de vigor para oponerse a una normativa que, de haberse llevado adelante en los términos inicialmente planteados, podría causar estragos irreversibles en un sector hoy por hoy estratégico.Clamor contra la "Ley Salgado"Aunque en estos momentos Gobierno y Oposición regional apenas mantienen interlocución, ambos han clamado contra el "palo de ciego" que supondrían las restricciones a la publicidad y distribución del vino. Si el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, ha calificado el anteproyecto de "golpe mortal para el sector", el líder regional del PSOE, Ángel Villalba, no ha dudado en desmarcarse de una normativa que considera "demasiado coercitiva" y ha pedido al gobierno central que excluya al vino de dichas restricciones.Diezmado el sector remolachero por mor de la OCM del ázucar, el vino se ha erigido en el producto estrella de la agroalimentación castellano-leonesa. Con cinco denominaciones de origen consolidadas (Ribera del Duero, Toro, Rueda, Cigales y El Bierzo) y otras cuantas zonas y comarcas emergentes, el sector vitivinícola viene manteniendo una proyección hasta ahora imparable no tanto términos cuantitativos como sobre todo cualitativos. La creciente calidad -y precio- de los vinos producidos en Castilla y León no guarda la mínima relación con el "tetrabrik" utilizado en el "botellón" juvenil.Aunque al final, como no podía ser de otra forma, la ministra Salgado ha empezado a recular a marchas forzadas, la Ley "antialcohol" no es la única sombra que se ha cernido últimamente sobre el sector del vino en Castilla y León.Autovía versus viñedosUna decena de bodegas enclavadas en el corazón de la Ribera del Duero, entre ellas la legendaria Vega Sicilia, están directamente afectadas por el trazado elegido por el Ministerio de Fomento para desdoblar la actual carretera nacional-122 en la autovía A-11. Dicho trazado, aconsejado por el Ministerio de Medio Ambiente, supone la expropiación de unas 60 hectáreas de viñedo, 14 de ellas de la afamada bodega.Según los responsables de Vega Sicilia -que, junto a Abadía de Retuerta (Novartis), ha recurrido ante la Unión Europea la Declaración de Impacto realizada por Medio Ambiente- la repercusión va más allá de los viñedos expropiados, ya que en su opinión la barrera arquitectónica de la autovía y la contaminación generada por el tráfico rodado afectarían negativamente a la calidad de toda la uva del entorno.