jueves 21 de febrero de 2008
El talón de Aquiles del gigante amarillo
Grandes nevadas, escasez de carbón: China, al borde del colapso
El mundo se estará calentando, pero en China tienen el invierno más frío desde hace cincuenta y cinco años. Entre las gigantescas nevadas y el aumento del transporte de viajeros, el país ha estado a punto de quedarse sin su combustible base: el carbón, porque no había trenes para moverlo. Y sin carbón, no hay calefacción, ni electricidad, ni… trenes. El círculo mortal. La escasez de carbón ha conducido al cierre de centrales eléctricas con una capacidad total de 40,99 millones de kilovatios, según datos dados a conocer por el organismo responsable del gobierno de Pekín, la Comisión Reguladora Estatal de Electricidad.
ÁNGEL MAESTRO
El informe de dicha Comisión señaló que a mediados del mes de febrero las reservas de carbón se sitúan en 21,24 millones de toneladas métricas, algo más que las del mes de enero, cuando las reservas habían registrado una baja anual del 40 %, descendiendo a 17.73 millones de toneladas, cifra que equivale a ocho días de suministro para las centrales termo eléctricas de China.
El transporte de carbón con las gigantescas cifras de tonelaje transportado se ha visto agravado no sólo por el reiterado problema de la saturación de la red ferroviaria china. Otros factores han incidido en la excepcional agravación de esta constante de los ferrocarriles chinos. Han sido las enormes nevadas que han afectado a la mayor parte de China.
Frente a las teorías del calentamiento, lo cierto es que China ha sufrido un enfriamiento de temperaturas a niveles que no se conocían desde hace 55 años. Abundando en el enfriamiento, Asia Central, las repúblicas ex soviéticas y en general Siberia se enfrentan a una disminución de las temperaturas de magnitudes desconocidas hace varios decenios. Según un gran experto, el profesor Jabibulo Absusamatov, científico del observatorio de San Petersburgo, el más importante de Rusia, la Tierra puede enfrentarse a un nuevo período glacial entre los años 2055- 2060.
Las fiestas empeoran las cosas
Pero en el caso de China y de la saturación de la red ferroviaria no han sido sólo las enormes nevadas las que han creado más problemas en el transporte ferroviario de carbón (de forma destacadísima el principal tráfico ferroviario chino), sino que con ocasión del Año Nuevo chino y sus fiestas adjuntas (la celebración más importante del gigante asiático), aumentó de forma extraordinaria el tráfico de viajeros, duplicando y triplicando servicios especiales, al no bastar el reforzamiento de los trenes habituales a pesar de haber aumentando hasta el límite el número de coches de las composiciones.
Tal incremento del transporte de viajeros, al que se dio prioridad durante la Fiesta de la Primavera, ocasionó la obstaculización del tráfico carbonífero, agravado además por las fortísimas nevadas, que obligaron a la movilización de las Fuerzas Armadas en grandes partes del territorio.
La demanda de carbón para la calefacción aumentó aún más el grave problema de saturación de los ferrocarriles, y a consecuencia de los problemas citados, según manifestaciones del Ministerio de Ferrocarriles, sólo se pudo satisfacer en los últimos días de enero y primeros de febrero un 25 % de la demanda diaria del transporte de carbón.
La nieve y el hielo, factores que interrumpieron las líneas de transmisión de electricidad, ocasionaron la paralización de 136 trenes, por citar sólo la provincia central de Hunan, en una de las más importantes arterias ferroviarias de China, la norte-sur que une Pekín con Guangzhou.
La nieve no sólo ocasionó los trastornos habituales derivados de tal circunstancia, sino que la caída de las líneas eléctricas ocasionó la paralización de gran parte de la red electrificada, causando el agravamiento de la situación. También, aunque en menor medida, las locomotoras diesel hubieron de enfrentarse a las excepcionales condiciones climatológicas, aunque la ausencia de catenarias no originó la paralización total.
El Ministerio de Ferrocarriles reforzó en lo posible la carga de carbón, combustible vital hoy en China, alcanzando la cifra de 36.100 vagones de carbón diario, un 30% más que las cifras habituales, en elevada parte pertenecientes al parque de los vagones más modernos de 100 toneladas, carga más tara. Tanto el material de tracción como el remolcado han estado al máximo de su capacidad.
El suministro en las líneas electrificadas se vio considerablemente agravado por la debilidad de las líneas suministradoras de alta tensión, al caer parte de las mismas por el efecto del hielo y la nieve.
Como es sabido los ferrocarriles chinos están acometiendo grandes inversiones no sólo en la renovación de estructuras, sino en modelos muy potentes de locomotoras eléctricas: en 600 locomotoras diesel construidas en China en base a los modelos más potentes de EMD y General Electric, y en vagones de gran capacidad de carga.
El enorme tráfico carbonífero representa posiblemente el mayor desafío al que se enfrenta la extensa red ferroviaria china.
http://www.elmanifiesto.com/articulos.asp?idarticulo=1668
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