jueves, septiembre 14, 2006

Fascistas ante el mundo

viernes 15 de septiembre de 2006
Fascistas ante el mundo
Juan Urrutia
E N el editorial del Gara del 11 de septiembre de 2006 se vierten sangrantes falsedades. El propósito de las mismas no es otro que dar una impresión nacional e internacionalmente de que los terroristas son víctimas de una brutal represión a causa de su ideología. También pretenden hacer creer que los constitucionalistas somos una especie de bestias fascistas que torturamos, reprimimos y mantenemos de forma encubierta el mismo sistema dictatorial que durante cuarenta años sufrió España. Lean a continuación las afirmaciones de Alizia Stürtze en el diario proetarra: • “ La aplicación retroactiva de la cadena perpetua; la eliminación de toda política de redención de penas; el mantenimiento ilegal de la dispersión; la cruel utilización del sufrimiento como en el caso del huelguista de hambre Iñaki de Juana, a quien piensan aplicar la tortura de la alimentación forzosa para quebrar su voluntad, y lo simbólico de su denuncia;” Respecto a lo retroactivo de la cadena perpetua —inexistente en nuestro país, donde el máximo tiempo que se puede mantener a alguien en prisión es de veintisiete años— imagino que se refieren a lo “injusto” de encarcelar a un terrorista por asesinatos cometidos hace tiempo, porque nuestra legislación dice al respecto: Ley Orgánica 10/1995, de 23 de noviembre, del CODIGO PENAL (B.O.E. de 24 de noviembre) Art. 2 1. No será castigado ningún delito ni falta con pena que no se halle prevista por Ley anterior a su perpetración. Carecerán, igualmente, de efecto retroactivo las Leyes que establezcan medidas de seguridad. 2. No obstante, tendrán efecto retroactivo aquellas leyes penales que favorezcan al reo, aunque al entrar en vigor hubiera recaído sentencia firme y el sujeto estuviese cumpliendo condena. En caso de duda sobre la determinación de la Ley más favorable, será oído el reo. Los hechos cometidos bajo la vigencia de una Ley temporal serán juzgados, sin embargo, conforme a ella, salvo que se disponga expresamente lo contrario. Lo de la redención de penas es un asunto curioso, pues la mayoría de los etarras liberados reinciden y muy pocos demuestran signos de arrepentimiento. Sin embargo han recibido más beneficios penitenciarios que ningún otro recluso (reducción de condenas a presos con delitos de sangre por realizar actividades deportivas o cursos de manualidades). Dispersión: sería interesante saber a cuántos asesinos no pertenecientes a ETA se les tiene en cuenta cuando piden cumplir condena cerca de su casa. El “huelguista” de Juana Chaos, está en prisión por segar veinticinco vidas e iba a ser liberado —a pesar de haber manifestado placer y burla ante el dolor de las víctimas— según regía el código penal de la época en que fue juzgado tras cumplir dieciocho años de cárcel, pero volvió a cometer delitos de terrorismo al escribir cartas al diario Gara señalando futuros objetivos para la banda de mafiosos que es ETA. • “la insistencia en una política mediática de odio y venganza, vehiculizada a través de ciertas asociaciones de víctimas como la sobredimensionada AVT;” Este comentario es especialmente hiriente. “Odio y venganza”: aunque las víctimas del terrorismo tienen motivos sobrados para sentir odio y sed de venganza —yo en su lugar los sentiría sin duda— siempre han dado un ejemplo de dignidad, resistiendo incluso por encima de lo humanamente soportable. Vean como ejemplo a la concejal del PP Pilar Elías, que sobrellevó estoicamente que el alcalde de Azkoitia (PNV) le exigiera tolerancia y comprensión con el asesino de su marido. • “El endurecimiento de las condiciones de vida en las prisiones; la pervivencia de la táctica de demonización, criminalización y animalización de los encarcelados vascos para deslegitimar las características políticas de su lucha y eludir así la responsabilidad histórica que los partidos tienen en la prolongación de un pasado traumático;” Las condiciones de vida en las prisiones españolas son infinitamente mejores para los etarras que para el resto de los presos. ¿Por qué? Porque amenazan a los funcionarios de prisiones con hacer daño a sus familias si no obtienen un trato preferente. Como ejemplo las palabras que el etarra Ignacio Bilbao Goikoetxea dedicó a uno de estos funcionarios. Le dijo que se iba a encontrar a “Blancanieves y los siete enanitos jugando al fútbol con las calaveras de su puta familia”. Con esto queda claro que a los terroristas no es necesario ni “demonizarlos”, ni “animalizarlos” y muchísimo menos “criminalizarlos”. Eso ya lo hacen ellos solitos. Respecto a “su lucha”, cada vez se ve más claro que poco tiene de política. Los intereses son económicos. ETA consigue por medio de la extorsión y empresas afines (Grupo Mondragón) en las que compra el sector de la población vasca que cree sus falacias, así como del dinero público que el gobierno nacionalista le regala por medio de subvenciones a academias de euskera y similares, adeptas al régimen (véase AEK, procesada en el dos mil por desviar más de mil novecientos millones de las antiguas pesetas a ETA). Tal es la cantidad de dinero que reciben, que evidentemente la paz les conviene muy poco. • “… la utilización sistemática de la represión y la violencia estatales, lastrando así preocupantemente el proceso con paralizantes cargas de profundidad; la potenciación de la legislación antiterrorista, de la Ley de Partidos y de la Audiencia Nacional, continuación clara de las leyes y aparatos de emergencia franquistas...” ¿Represión? Sí, la que obliga a miles de personas a caminar escoltadas en el País Vasco, la que hace que los ciudadanos vascos y constitucionalistas oculten su ideología por temor a represalias, la segregación de niños de padres no nacionalistas en las escuelas, el pensamiento único y forzoso para poder integrarse en la sociedad vasca; las amenazas a empresarios, el ostracismo social o la muerte a los disidentes —conste que ETA nunca ha asegurado que no vaya a volver a matar—, los criterios etnicistas a la hora de gobernar… Sí, existe la represión, pero la ejerce el nacionalismo en su conjunto. Ellos son los absolutamente miméticos con el franquismo. • “… prisioneros, el carácter político de cuya larga lucha el partido en el poder sin embargo reconoce desde el momento en que se apunta a un proceso de resolución del conflicto.” Aquí estoy de acuerdo con ellos, el PSOE ha legitimado el terrorismo, ha conseguido que matar merezca la pena. Sin embargo, como verán más abajo, no ha servido para la “paz” que tanto prometía el Gobierno. • “… exigir no ya sólo el acercamiento de los presos a cárceles de Euskal Herria y el respeto que como seres humanos y como presos políticos les asisten, sino la amnistía para los encarcelados y los exiliados es condición sine qua non para una verdadera y duradera resolución del conflicto. Del mismo modo que lo son la disolución de la Audiencia Nacional y la derogación de las leyes antiterrorista y de partidos.” Efectivamente no quieren la paz, se les hundiría el negocio. Piden cosas que saben son imposibles de conceder, incluso para un gobierno como éste, a fin de poder culpar ante sus seguidores a “la intransigencia de un Gobierno fascista” del fracaso del mal llamado proceso de paz, o más correctamente expresado, proceso de rearme y organización de la banda. El gran problema es que internacionalmente están empezando a hacerles caso, y diversas organizaciones defensoras de los derechos humanos y ‘antitortura’, comienzan a dar una imagen exterior de España de república bananera —a lo cual cada vez se acerca más— donde se tortura a los disidentes —cierto, pero se equivocan de disidentes— o se coarta la libertad de expresión, una vez más cierto: pero no la de los nacionalistas, sino la de los demócratas.

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