Urbaneja, A la coalicion por necesidad aritmetica

viernes 23 de noviembre de 2007
A la coalición por necesidad aritmética
Fernando González Urbaneja
El barómetro electoral de otoño del CIS, del que luego todos sacan conclusiones adicionales y base para sus propios cálculos, deja a los dos grandes partidos con el alma en vilo y con cierta confusión. Los socialistas no aciertan a comprender cómo no obtienen más ventaja frente a esa derecha asilvestrada que tienen enfrente. Y los populares no entienden que un Gobierno tan malo, tan equivocado, mantenga esos niveles de aceptación.
Pero así es la cosa, así salen las cuentas y se reflejan en casi todas las encuestas. Empate técnico con diferencias mínimas, en el margen de error estadístico, a favor de Zapatero. Con esas encuestas, descontando además que la participación efectiva el 9 de marzo puede ser menor de la que reconocen los sondeos, los populares esperan sacar algún voto y escaño más que los socialistas y éstos confían en un tirón final que les dé una mayoría neta como para volver a aliarse con grupos menores menos complicados que ERC.
Pero esta última encuesta deja a ambos partidos algo por debajo del 40% que les colocaría con grupos parlamentarios semejantes pero insuficientes para gobernar solos. El PP tiene difícil sumar grupos parlamentarios para gobernar y los socialistas están presos de su compromiso de no gobernar sin disponer de primacía en votos y escaños.
La aritmética electoral forzó los tripartitos en Cataluña y en el País Vasco. Se formaron esos gobiernos porque eran posibles, porque eran mejor alternativa para el PNV y el PSC que cualquiera de las otras posibilidades. Algo semejante le ocurrido a Aznar en 1996 cuando destacó a Rato y a Cascos para pactar con los nacionalistas. Y también a Zapatero en el 2004.
¿Qué puede ocurrir en marzo? Las hipótesis son abiertas y no hay que descartar el modelo alemán, la insólita e inesperada gran coalición, que tuvo que armarse porque era la única opción aritmética posible y viable. No es probable que ocurra aquí en marzo, pero tampoco es imposible, y a más de uno le parece muy conveniente. Con este barómetro del CIS lo improbable es aritméticamente posible.
http://www.estrelladigital.es/diario/articulo.asp?sec=opi&fech=23/11/2007&name=urbaneja