German Yanke, Obstruccion

lunes 26 de noviembre de 2007
Obstrucción
Germán Yanke
Resulta un poco sorprendente que el presidente Rodríguez Zapatero reclame de los electores una mayoría más amplia no para contar con más apoyo y llevar a cabo su programa sin tener que negociar a la baja, sino para evitar la “obstrucción” del PP. Podría pensarse que se refería a que, si el principal partido de la oposición obtiene un mejor resultado en los próximos comicios, aunque no gane, podría estorbar hasta la paralización la acción de su futuro Gobierno, pero el presidente habló ayer del asunto para definir lo que, a su juicio, ha sido la labor de oposición. Es decir, que lo que pretende es quitarse ese inconveniente.
Suena un poco sorprendente que se utilice la palabra obstrucción cuando, a lo largo de toda la legislatura, la descripción de lo ocurrido ha sido un PP minoritario y sólo ante una mayoría que avanzaba hacia el progreso, la ampliación de los derechos individuales y la importancia de una España que va cada vez mejor. Se diría que el único escollo con el que se ha encontrado el Gobierno es la renovación del Consejo General del Poder Judicial, materia en la que —sea cual sea la opinión sobre lo sucedido— precisaba necesariamente el consenso con el PP. Nada ha impedido, por otra parte, la transformación que el PSOE y sus socios han llevado a cabo en variados campos, hasta el punto de que el partido gubernamental se ufana de haber cumplido puntualmente su programa electoral.
O el presidente quiere decirnos que, a estas alturas, su programa a estas alturas es más anti-PP que socialista o no se entiende esa queja, un poco de niño consentido. O se pretende que la oposición esté callada o no se entiende que ése sea precisamente el objetivo para sumar más votos.
Ayer mismo, en el diario El País José María Ridao, un intelectual en el que el presidente confió, defendía el proyecto de la izquierda y negaba el tópico de que está en crisis. En ese contexto, denunciaba unas críticas que más que referidas a lo que la izquierda democrática dice, se dirigen contra lo que gustaría que dijese para acompañarlo de las críticas prefabricadas. Es interesante ese punto de vista y lo sería aún más si la izquierda no hiciera lo mismo con la derecha. Que el reproche del presidente a la derecha sea, tras todo lo ocurrido, que ha “obstruido” su labor de gobierno no es sino la creación de un artificio para que la crítica sea más fácil. Pero es demasiado fácil.

http://www.estrelladigital.es/diario/articulo.asp?sec=opi&fech=26/11/2007&name=german