jueves, noviembre 29, 2007

Enrique Rosendo, ¿Quien le vendió su fondo de inversion?

jueves 29 de noviembre de 20007
Capitalismo popular
¿Quién le vendió su fondo de inversión?
Un país en el que los ciudadanos tengan cultura económica, que ahorren e inviertan de forma dinámica sus intereses, será un país en donde se pondere más y mejor la libertad. Un país con más libertad es siempre una sociedad más próspera y rica.

José Enrique Rosendo

El total de patrimonio gestionado en fondos de inversión nacionales suma a día de hoy alrededor de 252.930 millones de euros, o lo que es lo mismo, aproximadamente una cuarta parte de la cotización global de la bolsa española. De ellos, casi la mitad están gestionados por solo cinco entidades: Santander, BBVA, Ahorro Corporación, La Caixa y Banco Popular; pero los dos mayores bancos españoles concentran nada más y nada menos que el 40% de cuota de mercado de este segmento financiero.
Esto quiere decir que los españoles que invierten en fondos de inversión lo hacen fundamentalmente guiados por las grandes cadenas comerciales que dirigen Emilio Botín y Francisco González.
En un país que, merced al milagro económico de la era Aznar-Rato, se ha ido generalizando poco a poco el denominado capitalismo popular que en su día proyectaran Reagan y Thatcher en su ola de revolución liberal-conservadora, la mayor parte de los inversores confían exclusiva o principalmente en lo que les asesora el director de la oficina de la esquina, es decir, el que se encarga de su cuenta bancaria desde que la abuela le abrió la libreta cuando hizo la primera comunión.
No es de extrañar, pues, que muchos partícipes de fondos desconozcan adecuadamente no ya la mecánica de los productos que contratan, sino incluso la rentabilidad que obtienen con los mismos. Un ejemplo evidente son los planes de pensiones, ya que un alto porcentaje de los mismos obtienen una rentabilidad neta por debajo de la inflación, o sea que técnicamente usted puede incluso estar perdiendo dinero de cara a su futura jubilación. Y no hablemos de la renta fija garantizada, ahí es nada.
El Santander y el BBVA son dos grandes y sólidos bancos, con una estructura financiera férrea y eficiente. Nuestro sistema bancario es uno de los mejores del mundo. Y la raíz de esta envidiable situación debemos buscarla en esas tupidas redes de oficina que cubren todas las manzanas de ciudades y pueblos de nuestra geografía. A la orden de comercializar un producto, miles de comerciales salen a la calle en busca de inversores que confían sus ahorros sin hacer demasiadas preguntas.
El rápido crecimiento económico de los españoles experimentado en los últimos doce años ha permitido la extensión de ese denominado capitalismo popular al que antes hacía referencia. Eso es un dato positivo, por cuanto la extensión del concepto de propiedad sobre grandes corporaciones nos hace partícipes de ideas como la libre empresa y la defensa de la liberalización de mercados. Sin embargo, esa rapidez en acceder a estos productos no ha venido acompañada de un incremento de la formación financiera del español medio. De este modo, somos poco exigentes y no sacamos todo el jugo posible a nuestros ahorros.
Un país en el que los ciudadanos tengan cultura económica, que ahorren e inviertan de forma dinámica sus intereses, será un país en donde se pondere más y mejor la libertad. Un país con más libertad es siempre una sociedad más próspera y rica. Pero, ¿quién si no nosotros mismos tenemos que ponerle el cascabel al gato? Esa es la cuestión. A los españoles nos gusta poco profundizar en las cosas del dinero. Debe ser nuestra cultura católica, en donde el trabajo era un castigo bíblico y la riqueza emprendedora un feo al honor noble de esta legión de hidalgos.

http://www.libertaddigital.com/opiniones/opinion_40655.html

No hay comentarios: