lunes 29 de mayo de 2006
Más palabrería, como siempre
Yolanda Salanova
L A chulería de la banda terrorista ETA no tiene límites. Tras leer la "entrevista" —pongo comillas porque da la impresión, si no la certeza, de que tanto las preguntas como las largas respuestas estaban redactadas de antemano— del vocero etarra y la "izquierda abertzale", a la que los etarras mencionan tropecientas veces, la conclusión que se puede sacar es la misma de siempre. La banda sigue amenazando, se erige en árbitro del "proceso" y el "conflicto" provocado "por los estados opresores" sigue, por lo que dicen, y no terminará hasta que "dejen de oprimir, perseguir, secuestrar, torturar, robar y atentar contra los derechos de su ‘Euskal Herria’, en la que, cómo no, como siempre, incluyen a Navarra y a las provincias francesas del sur. Mantiene sus posiciones, su victimismo en nombre del "pueblo vasco" —no hay ciudadanos para ETA, como no los hay para los nazionalistas—, los derechos son "de Euskal Herria", y sigue poniendo condiciones inasumibles por cualquier gobierno democrático. De entrada, si se sabía, anunciada la "entrevista", que unos peligrosos delincuentes habituales organizados iban a estar en un lugar concreto, a ver por qué razón no se trató de detenerlos y ponerlos ante el juez. Claro que entonces "el proceso" no hubiera podido continuar, a saber: Patente de corso para los "abertzales", terroristas y cómplices. Amnistía para los criminales ("presos políticos”, que dicen ellos), el acatamiento de todas y cada una de sus condiciones, todas ellas de índole político ("no habrá precio político", ZP dixit) es lo "único" que falta para que dejen de asesinar definitivamente. Porque eso de que no hay vuelta atrás, o que la banda criminal esté debilitada, es un invento de los partidos para rentabilizar el "proceso" y adquirir protagonismo. Etecé, etecé… O séase: que si el mentado "proceso" no es abortado por decisión del gobierno, quienes van a gobernar ‘estepaís’ van a ser los etarras y sus filiales, no descartando sus graciosas magnificencias etarras la inclusión de los nazionalistas "moderados" (léase PNV). A menos que el Congreso deje de avalar la locura megalómana de ZP y sus lacayos incondicionales. Sigo creyendo que NO se tiene nada en absoluto que negociar con los chantajistas criminales, ni con los nazionalistas, ni con nadie. Y sigo creyendo que los ciudadanos, que no súbditos, tenemos que manifestarnos de todas las formas posibles, en la calle y en las instituciones, en las urnas... Y dejarle claro a este gobierno que no estamos por la cesión de nuestras libertades ciudadanas, nuestros derechos individuales, nuestro derecho a decidir que no queremos ceder al chantaje terrorista, nuestra obligación de defender el Estado de Derecho, único que nos ampara, a pesar de la espada de Damocles que cuelga sobre la cabeza de la democracia, y por lo tanto, la de los ciudadanos demócratas. A pesar de ser un varapalo para los "negociadores" (gobierno y partidos que lo sostienen) tengo la seguridad de que la lectura de la 'entrevista' será tan positiva que ZP y sus socios, incluido el "mundo abertzale", lanzarán las campanas al vuelo, dirán que "se está en el camino correcto" y se avanza hacia la "paz”. Obviar a las víctimas (los victimarios también incluyen entre ellas a los criminales muertos como consecuencia de sus propias bombas, destinadas a otros) es algo que la banda, igual que ZP, Peces, y demás fauna pedestre, deja claro: nada de participar en "el proceso", nada que decir, contentos tendrían que estar, si los verdugos dejan de asesinar. Todo resulta tan repugnante, que si leen la 'entrevista', les vendrá bien tener un antináuseas a mano. Yo he tenido que tomármelo.
lunes, mayo 29, 2006
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario