28-I-2009
El montaje se desmorona
El intento del diario El País por hacer pasar como culpables a quienes, en todo caso, serían las víctimas de esos supuestos seguimientos ilegales, está quedando cada vez más de manifiesto.
Aunque la apertura de diligencias por parte del Juzgado de Instrucción –que se ha producido gracias a la denuncia presentada por la Comunidad de Madrid– sea la vía más segura para conocer qué hay de cierto y de falso en el caso del supuesto espionaje en la Comunidad de Madrid, el intento del diario El País por hacer pasar como culpables a quienes, en todo caso, serían las víctimas de dichos seguimientos ilegales está quedando cada vez más de manifiesto.
A la clamorosa falta de pruebas que El País ha aportado para acusar al Ejecutivo madrileño de haber espiado, entre otros políticos, a algunos miembros de ese mismo Gobierno –acusación que el autor de esa "información" ha negado haber hecho en su comparecencia ante el fiscal–, se ha unido la información del diario El Mundo, según la cual el ex tesorero del PP, Álvaro Lapuerta, ya tenía en 2008 dossieres que afectaban al vicepresidente González y al consejero de Interior, Francisco Granados.
Esta información ha sido confirmada este mismo martes por Esperanza Aguirre, quien ha asegurado que ya en 2006 le llamó el presidente del partido, Mariano Rajoy, para decirle que el tesorero, gracias a sus amistades y contactos en la guardia civil y en la policía, tenía unos dossieres sobre González y Granados, a quienes la presidenta madrileña inmediatamente pidió que hablaran con el tesorero para aclarar cualquier asunto que pudiera poner en duda su honorabilidad. Según Aguirre, se demostró que todo esos dossieres eran "falsos y calumniosos".
Con independencia de que se deba o no calificar como "espionaje" lo que originó la elaboración de esos informes que trataban de cuestionar la honorabilidad de los colaboradores de Aguirre, lo que parece evidente es que no van a ser los inductores del mismo aquéllos contra los que iba dirigido.
En cualquier caso, y por mucho que Lapuerta haya denunciado, a su vez, el haber sido sometido a "vigilancias", no parece que el silencio de Rajoy respecto a estas informaciones sea la postura más adecuada. Especialmente después de su condescendiente silencio ante la credibilidad que Gallardón ha otorgado, sin prueba alguna, a las "informaciones" de El País. Si esa "unidad del partido", a la que ahora Rajoy apela, se ha quebrado es en buena medida porque su lider, más por incompetencia que por malicia, no estableció en su momento ni un criterio único en relación al deseo de Blesa de eternizarse en Caja Madrid, ni tampoco cuando El País inició sus acusaciones, sin prueba alguna, contra el Gobierno de Esperanza Aguirre.
En cualquier caso, el montaje de Prisa ya se está desmoronando, como también lo prueba el rotundo desmentido que desde la UGT se ha hecho este martes de la "información" de ese diario, según la cual este sindicato habría denunciado un supuesto "acoso" a los funcionarios de la Comunidad por "negarse a seguir a políticos".
Pese al rotundo desmentido que ha hecho el sindicato en un comunicado, y que el diario de Prisa no ha querido reflejar en su edición digital de este martes, no dudamos de que El País proseguirá en su estrategia de "calumnia que algo queda"; estrategia de la que Esperanza Aguirre, ciertamente, tiene sobrados motivos para sentirse víctima.
http://www.libertaddigital.com/opinion/editorial/el-montaje-se-desmorona-47508/
martes, enero 27, 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario