El oso de la Puerta del Sol
FELIX MADERO
Lunes, 17-11-08
EN Madrid, en la boca de la calle del Carmen habita un oso de hierro que pasa los días comiendo madroños. Allí se hacen fotos los turistas mientras los madrileños van a sus asuntos sin reparar en la estatua del pacífico plantígrado. Y allí, un grafitero sin arte ha dejado escrito esta leyenda: «El oso alucina». Si no la han borrado, póngase en situación de oso y mire el espectáculo. Alucinará. Desde allí, silla privilegiada de España que, a diferencia de la Zapatero en Washington, no gira y resbala, verá un espectáculo singular, auténtico, genuino... El que surge de la fiebre patriótica que, de repente, les ha dado a ministros y jefes del PSOE. Ahora todo es España, patria y patriotismo. José Blanco pide patriotismo al PP. Rubalcaba dice que los de Rajoy son «patriotas raros». Pero, hombre, si algo son los del PP es eso. Serán aburridos, lentos, obtusos; estarán divididos en Navarra y desnortados en buena parte de España, pero ¿patriotas? Ocurre, sin embargo, que no nos han puesto la bandera de España en la mesa de la cumbre. Y ocurre que así, como relata la vicepresidenta, vamos saliendo del rincón de la Historia. ¡Pobre oso, cómo alucina!
Vuelve de Washington Zapatero y se encuentra con que aquí su silla giratoria no sirve de nada. Me gusta ver al presidente de España entre algunos líderes mundiales (?) que mandan bastante menos de lo que ellos imaginan. Me gusta ver a Zapatero diciendo eso de que hay que evitar salarios astronómicos (estratósfericos, que diría Rajoy), pero no la forma en que se ha hecho ver en la cumbre. Hemos pedido y rogado para estar allí. Y el oso, cuando piensa en lo que habrá que pagar, alucina. Vaya si alucina. Es posible que lo de Le Figaro sea una exageración, pero ese alarde de pasión expresado en «Te daré lo que quieras» lleva implícita la melodía del mejor bolero. Ese que Zapatero ha bailado con Bush por espacio de unos segundos. ¿Es Bush un tonto de la política, una ruina andante o es hasta el final el acompañante perfecto para una foto efímera y hueca? A tenor de la cara de Zapatero, Bush todavía manda mucho. ¿Lo han visto en la foto? Está feliz y su mirada dice: A mí me quedan más de tres años y tú te vas a casa. Y mientras tanto, el ministro Sebastián cuenta los días que le quedan a Bush. Claro, mira la foto el oso madroñero, y alucina. Por Dios que alucina.
Es lunes, y Zapatero constata que su país se parece mucho al del viernes. No sé si alguien le habrá dicho que su discurso bienintencionado no llega a las casas con problemas. Que el autónomo no aguanta, que el empresario chico sufre y hace cola en el banco esperando un crédito, que el parado no sabe nada de cumbres ni le interesan sus ocho minutos de gloria efímera y aburrida. Todos ellos sí que están en el rincón de la Historia, señora vicepresidenta. Zapatero se hizo la foto. Nuestra bandera no estaba en la mesa. El Financial Times dice que es el gobernante europeo más rechazado por sus ciudadanos por la forma en que gestiona la crisis. Pero hemos salido del rincón de la Historia. Cómo no va a alucinar el oso de la Puerta del Sol.
Baura, al que Zapatero debería leer a diario en ABC, asegura que en el escenario de la Historia no hay rincones, sólo circunstancias y casualidades. Que se lo cuenten, por favor.
http://www.abc.es/20081117/opinion-firmas/puerta-20081117.html
domingo, noviembre 16, 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario