jueves 6 de marzo de 2008
Rajoy vuelve a ganar el cara a cara
José Meléndez
E L enorme poderío mediático del PSOE había preparado el segundo debate entre los dos candidatos a la presidencia del Gobierno con todo cuidado, sin olvidar ni un detalle en esa difícil estrategia de hacer ver las cosas como se quiere que se vean. Como en la opinión pública, a nivel de calle, nadie había dado crédito a los esfuerzos que hicieron el PSOE y sus terminales de comunicación para tratar de presentar a Zapatero como vencedor del primer debate, esta vez acordaron que lo mejor era intentar un sutil lavado de cerebro antes de que se desarrollase el acontecimiento.
El despliegue que realizaron las televisiones públicas, de signo gubernamental, y las privadas que deben su existencia a la magnanimidad de Zapatero, fue notable y desde dos horas antes del comienzo del debate estuvieron inundando a sus telespectadores con las opiniones de “expertos” adictos que después examinarían el resultado a su manera y reforzarían sus argumentos con los resultados de unas encuestas que son completamente engañosas por dos razones: porque para valorar el resultado de una encuesta hay que saber quien la ha encargado y porque en este particular tipo de entrevistas a Rajoy no lo valoran bien mas que lo simpatizantes de su propio partido.
Y en ese ambiente comenzó el debate. Como si José Luis Rodríguez Zapatero no pudiera sustraerse a su innata inclinación al engaño, comenzó con dos afirmaciones que pronto se demostró que o eran mas que ejercicios de voluntarismo: su decisión de no caer en tensiones o descalificaciones y la presentación a los televidentes de un fantasmagórico “libro blanco” en que dice estar contenido su proyecto político ¡hasta el 2.015! –o sea que ya se le queda pequeña la legislatura que ahora se juegan- y que igual puede ser un resumen de datos que una guía de hallazgos arqueológicos, porque cada vez que mostraba sus grandes páginas blancas no podía verse su contenido en la pantalla, en contraste con los cuadros de datos nítidos que mostraba Rajoy para corroborar sus afirmaciones.
De este debate, como del anterior, no podían esperarse grandes cosas por el encorsetamiento a que estaban sometidos sus contenidos, pero fue nuevamente la contundencia verbal del candidato popular el que logró librarlo en parte de ataduras y convertirlo en un debate mas ágil de lo que cabía esperar. Esta vez la dureza la puso Zapatero, pero se encontró con unas respuestas que terminaron por hacerle perder los nervios en varias ocasiones.
A mi juicio, Zapatero cometió dos grandes equivocaciones en el debate: tratar de escudarse una vez mas en la guerra de Irak y en el 11M cuando era implacablemente acusado por Rajoy de un hecho incuestionable como es el haber mentido a la opinión pública sobre las negociaciones con ETA y el presumir de que en su mandato ETA había perpetrado solo cuatro muertes mientras en los anteriores gobiernos del PP se habian registrado mas de 200. Pero tuvo muchas mas, en su constante afán por salirse de los atolladeros. A las documentadas criticas a la inexistente política económica del Gobierno, Zapatero no tuvo otra salida que entablar una inútil y superflua polémica sobre la primera pregunta que le había dirigido Rajoy en su primer enfrentamiento parlamentario hace cuatro años Una polémica sin sentido porque todo cuanto se dice en las Cortes Generales está registrado en el Diario de Sesiones. Y se encontró al borde del K.O. cuando Rajoy le emplazó a comprometerse a que todo español tiene derecho a la enseñanza y el uso del castellano y a decir si aprueba o no que un comerciante sea multado por poner en castellano el nombre de su negocio. Estuvo mas veces en peligro de rodar por la lona, pero le salvó el recurso de las interrupciones, esta vez mas ruidosas y numerosas que en el debate anterior, hasta el punto de que a los telespectadores se le hacía difícil entender lo que decía Rajoy porque Zapatero no lo dejaba hablar ante la pasividad de la moderadora Olga Liza que, dicho sea de paso, tuvo una actuación lamentable, porque en estos debates la única labor del moderador es velar por la igualdad de los tiempos, evitar los denuestos si son demasiado fuertes y no dejar a los contendientes el recurso de interrumpirse, cortando el debate y reanudándolo en el punto donde se han producido las interrupciones Si la moderadora hubiera hecho eso, como era su obligación, estaríamos todavía pegados a la pequeña pantalla.
La superioridad de Rajoy en materia de economía, de empleo, de políticas sociales y de inmigración fue evidente porque evidentes son los fracasos del gobierno de Zapatero en estos temas. A la retórica grandilocuente y vacía de un Zapatero a la defensiva, Rajoy oponía la contundencia de los datos Por lo tanto, el problema de las propuestas de Zapatero para el futuro es de credibilidad, porque si no las ha puesto en práctica en sus primeros cuatro años de gobierno en los que ha dilapidado el caudal de ilusión que el electorado puso en él, ¿con que títulos va a pedir ahora una confianza que él solo ha perdido con su política errática?
No sirve la cantinela que ayer repetían como en un coro bien orquestado las terminales mediáticas del PSOE de que Rajoy no presentó proyectos. Eso es mentira, porque en una campaña electoral los proyectos están contenidos en el programa de cada partido y el PP se presenta ante las urnas con proyectos mas ambiciosos, contrastados y eficaces que los del PSOE, como es la rebaja de impuestos en profundidad que derjará mas dinero n manos del hombre de la calle para atender a sus necesidades y de la pequeña y mediana empresa para poner a flote sus negocios. Ante eso, los 400 euros prometidos por Zapatero no pasan de ser una subvención, formula tan querida de los socialistas para fomentar el clientelismo.
En un examen subjetivo del desarrollo del debate, puede decirse que Rajoy volvió a ganar porque empleó argumentos más sólidos que su rival. Por eso, Rajoy convenció mas a sus propios partidarios que Zapatero a los suyos. En la medida en que uno u otro hayan sabido calar en los indecisos o en los que no tienen un criterio definido, estará la clave de las elecciones del próximo domingo.
http://www.vistazoalaprensa.com/firmas_art.asp?id=4483
jueves, marzo 06, 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario