La Administración los llama "móviles"
Los burros salvan la educación en Colombia
Increíble, pero cierto: gracias a quince burros, quince, los niños de la zona rural de Ovejas, en Sucre, Colombia, van a poder asistir a la escuela. Algunos de esos niños viven hasta a tres horas de distancia del colegio, en un lugar muy mal comunicado. Los burros permitirán superar esos obstáculos. Lo más divertido es el nombre administrativo que reciben los jumentos: los llaman "móviles". Pasen y vean.
elmanifiesto.com
26 de junio de 2008
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http://www.eltiempo.com/colombia/caribe/2008-06-21/ARTICULO-WEB-PLANTILLA_NOTA_INTERIOR-4336386.html
15 burros para transporte escolar entregó administración de Ovejas (Sucre)
Foto: Oswaldo Rocha
Con este medio de transporte, el alcalde de Ovejas (Sucre) busca disminuir la deserción escolar en el Centro Educativo El Palmar.
La alegría en los rostros de los pequeños saltaba a la vista luego de la donación de la administración para disminuir la deserción escolar por la falta de transporte en el Centro Educativo El Palmar.
Se les llama 'móviles' y es el medio de transporte de los estudiantes que viven hasta tres horas de la institución, en zona rural.
"No serán burros sino móviles y se transportaran 2 ó 3 estudiantes, que se ubiquen en la misma vía. Con esta donación disminuirá la deserción escolar (se registran de 15 a 20 casos anuales), los niños ya no dirán 'no voy a clases porque esta llovido o me voy a ensuciar los pies', porque ya tienen su medio de transporte", dijo Aníbal José Mercado Domínguez, director del Centro Educativo El Palmar.
Ahora, niños que se beneficiarán de este medio de trasporte reducirán hasta en 2 horas el tiempo para ir a la escuela y regresar a sus casas.
"Yo vivo lejos, salgo a las 6 y 30 de la mañana para estar a las 7:30 en el colegio y cuando llueve cojo el lado que tiene hierba, para no llenarme tanto de barro los pies porque me toca quitarme los zapatos y traerlos en la mano y cuando llego al colegio me los pongo. Hoy estoy feliz porque si me dan un burrito no caminaría tanto, no me ensuciaría los pies cuando llueve y a la hora de regresarme no me asolearía tanto", dijo esperanzada Olga Lucía Mestre, una niña de 10 años, estudiante de quinto de primaria del colegio de El Palmar.
Aunque los beneficiados sólo es un grupo (los que viven más lejos) los 180 estudiantes del Centro Educativo estaban alegres porque sus compañeros no tendrán que padecer tanto para llegar a las clases.
"Los burros son una ayuda para los que están lejos. A mi me daba pesar ver a mis amiguitos que llegaban a pie descalzos", afirmó Ángela Sandri, estudiante de quinto.
No fue fácil la consecución
Aunque la propuesta presentada por los docentes y padres de familia al alcalde de la localidad Antonio García De la Rosa se hizo realidad, esta se convirtió en toda una odisea para cristalizarla.
"Paradójicamente, es más fácil comprar un computador que se consigue en 5 minutos que unos burros. Tardamos desde el mes de febrero que recibimos a propuesta de los directivos y padres de familia del colegio para conseguirlos. No encontrábamos en la página del Cise de la Contraloría en la que se reporta todo, como justificar la compra de burros. Se tuvo que pedir una autorización especial a la Contraloría. Y permisos del ICA, la Gobernación, Secretaría de Gobierno y Secretaría Agropecuaria Departamental. Además de reunir una serie de requisitos para lograr la compra", manifestó el alcalde García De la Rosa.
La compra de los animales también se dio de manera paulatina porque la persona que suministró los burros, se encargó de hacer una buena selección.
"Se recogieron animalitos en buen estado físico y que garantizarán el transporte de los niños sin problemas. Se tuvo en cuenta además el sexo de los animales para la procreación de los mismos. Hay burros y burras, y dentro de la dotación de los 15 según el que los suministró, hay un burro yegüero, es decir que puede cruzarse con yeguas. Por tener esta fortuna, nosotros nos encargaremos de brindarle asistencia técnica a los animales con el apoyo de la Umata de Ovejas", dijo el Mandatario. Cada burro tuvo un costo de 330 mil pesos, incluyendo la silla.
"Nos faltan 15 burros más por entregar que se distribuirán después de las vacaciones de mitad de año, cuando inicie nuevamente el calendario escolar, en las localidades de Don Gabriel, San Rafael y Canutal, que están aledaños a Chengue", puntualizó García.
LUZ VICTORIA MARTÍNEZ
Especial para EL TIEMPO
OVEJAS (SUCRE)
miércoles, junio 25, 2008
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1 comentario:
Estas iniciativas, aunque parezcan simples, se constituyen en grandes soluciones para la niñez ávida de conocimientos. Felicito al Alcalde y su administración, no obstante que soy cachaco (Bogotano), pero con mi corazón en manos de una ovejera residente en Cartagena.
Alvaro Gómez
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