Rajoy, la mejor opción
Ernesto Ladrón de Guevara
E STAMOS en situación de máxima gravedad: Un desempleo desbocado. La morosidad bancaria en índices desconocidos hasta el presente. La producción industrial bajo mínimos. La estabilidad institucional y la cohesión territorial en situación de paraplejía, y sin visos de solución para una España descompuesta en su estructura. Con un Gobierno en España que ha conspirado de forma continuada contra el Estado de Derecho y ha resucitado a los zombis durmientes del pasado. Y lo que es peor de todo: con los esquemas de valores rotos, la corrupción generalizada y una autoestima como Nación histórica de sus ciudadanos en descalabro absoluto, fruto de un sistema educativo demencial. Y todo ello en un contexto europeo en desmoronamiento, con la crisis de confianza mordiendo los talones de los diferenciales de la deuda, en subida creciente.
Cuatro años más en esta situación y acabamos a tortas. Quien no lo vea es un imbécil.
Rajoy no es un líder político ni un estadista. Es más bien un político tirando a amorfo, cierto, pero es lo que tenemos. Yo tengo la seguridad de que es un buen gestor, que pondrá las bases para frenar la caída en barrena que nos afecta. No se si logrará poner la gráfica de evolución económica con pendiente creciente, cuestión que va a ser problemática en la primera legislatura de su mandato, pero al menos configurará las variables que provoquen la confianza necesaria para atraer inversores internacionales, los mismos que ahora mismo están espeluznados por esta banda de inútiles que nos gobiernan. Al menos ha dicho algo que me alienta, y que debe aliviar a las víctimas, y es que no va a negociar con la banda de criminales que presionan a la opinión pública para segregar al País Vasco de España, con la excusa de la tregua condicionada que han anunciado. Solo por eso merece mi voto.
Me parece una persona sensata y seria, prudente y razonable, que hará las cosas con la moderación que requiere una sociedad profundamente desvertebrada, desconcertada y con muy poca formación humanística, para no dar excusas a los amigos de los socialistas, para la agitación.
No estamos para aventuras ni alternativas inciertas. Hay que concentrar el voto en los populares, para que tengan un margen de legitimación suficientemente holgada, al efecto de parar los pies a quienes están al acecho para alterar la normalidad democrática y la estabilidad institucional.
Yo, en la medida de las posibilidades personales y sin que nadie me haya llamado para acompañar en la campaña, haré lo que pueda para que Rajoy salga lo más victorioso posible y que el PSOE se descalabre, para forzar su regeneración o refundación. Una izquierda moderada y constructiva es necesaria para España. Si consideramos izquierda a una sociodemocracia leal con el marco jurídico que nos dimos los españoles, aunque muchos de nosotros anhelemos su reforma.
http://www.vistazoalaprensa.com/firmas_art.asp?id=6280
No hay comentarios:
Publicar un comentario