lunes 4 de agosto de 20008
De Juana y el Estado de derecho
Salvajismo sobre salvajismo
Nuestro “Estado”, si es que a esto que soportamos los españoles puede dársele este nombre, es tan salvaje que los terroristas convivirán “apaciblemente” con las víctimas y sus familiares. Eso quiere decir que los criminales han vuelto a ganar.
Agapito Maestre
Zapatero ha conseguido añadir salvajismo a su salvaje negociación con ETA. De Juana Chaos, un símbolo del terrorismo de ETA, ha ganado. Está en la calle. El espíritu democrático que caracterizó durante la anterior legislatura a las grandes manifestaciones de las víctimas del terrorismo contra la negociación del Gobierno con ETA ha vuelto a perder. Gobernantes, legisladores, políticos y jueces están con Zapatero, o sea, comparten su "política" negociadora con el terrorismo. Los terroristas persisten en matarnos y Zapatero en integrarlos en una sociedad de carácter ovino. Más aún, Zapatero ha conseguido que Rajoy se sume a este inmoral proyecto: los terroristas tienen que ser integrados en la sociedad aunque tengan que vivir un poco alejados de sus víctimas y cumplir con su responsabilidad civil. ¡Cuánto cinismo!
Aparte de que las víctimas hace ya mucho tiempo que conviven con los asesinos, y aparte de que la propia Audiencia Nacional dictó en 2005 sentencias para que los criminales que salen de la cárcel vivan lejos de las víctimas, resulta bochornoso, desde el punto vista de una sociedad desarrollada moralmente, que la entera negociación de Zapatero y Rajoy sobre cómo combatir el terrorismo se resuma, según ha dicho el segundo, "en que los terroristas no pueden vivir cerca de sus víctimas y sobre todo que los etarras abonen las indemnizaciones a sus víctimas y que no puedan eludir su responsabilidad civil."
Cualquiera que lea con sentido común esas declaraciones tiene que sentir vergüenza ajena. Millones de ciudadanos en la anterior legislatura salieron a la calle para acabar con el terrorismo y, sobre todo, para que los terroristas cumplieran toda la condena impuesta y, naturalmente, para que se legislase la cadena perpetua contra los asesinos, pero los dos principales dirigentes de España sólo están preocupados porque puedan "convivir" los criminales con las víctimas. Si no fuera dramática esta situación, diría que todo este cambalache sobre los terroristas suena a chiste malo y negro.
Nuestro "Estado", si es que a esto que soportamos los españoles puede dársele este nombre, es tan salvaje que los terroristas convivirán "apaciblemente" con las víctimas y sus familiares. Eso quiere decir que los criminales han vuelto a ganar. Se han impuesto a los ciudadanos. Ellos seguirán exhibiendo su arma asesina ante quien ose llamarles por su nombre: asesinos. De hecho, insisto, hace demasiado tiempo que las víctimas están soportando la presencia cotidiana y constante de sus asesinos. Parece increíble que una sociedad desarrollada, según el lenguaje de los políticos y los falsos juristas, permita tal salvajismo, pero es un hecho que sobre el dolor de las víctimas, sí, sobre la sangre de los asesinados, el sufrimiento y desprecio de sus familiares, amigos y conciudadanos se construye un "Estado" que algunos insisten en llamarle Estado de Derecho. Imposible.
Nunca un Estado de Derecho puede construirse sobre la sangre de los ciudadanos, menos aún juntando a los criminales con sus víctimas. ¿Cómo puede "convivir" un asesino en serie, como es el caso de De Juana Chaos, al lado de los familiares, amigos y conciudadanos de sus víctimas? ¿Cómo es posible decir que eso es el Estado de Derecho? Aparte de una falsedad semántica, es una ignominia intelectual llamarle "Estado de Derecho" a un Estado, o mejor, a un Gobierno que instrumentaliza el Estado convirtiendo el derecho y la ley en una propiedad particular para justificar cualquier barbaridad, por ejemplo, que a un asesino en serie no sólo le salgan casi gratis sus crímenes, sino que se le sitúe al lado de las víctimas para seguir intimidando a los familiares de sus asesinados.¿Cómo hay jueces a los que no se les cae la cara de vergüenza cuando defienden un "Estado de Derecho" donde viven revueltos los asesinos con sus víctimas? ¿Qué tipo de moralista es quien fomenta que el asesino tiene que vivir con la víctima?
En verdad, sólo quien viva en una situación de salvajismo intelectual y moral puede defender algo parecido a lo que está pasando en esta España trágica y cruel. Sólo un salvajismo intelectual, como el instalado en España hace décadas, hace posible que sigamos hablando del "Estado de Derecho". En cualquier caso, no seré yo quien diga que esta sociedad es un fracaso moral ni que este "Estado" es un fracaso democrático, si previamente no reconozco que legisladores y jueces, gobernantes y políticos, han contribuido por igual a la construcción de este "Estado" semisalvaje.
http://www.libertaddigital.com/opinion/agapito-maestre/salvajismo-sobre-salvajismo-44754/
domingo, agosto 03, 2008
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