Ladron de Guevara, Corrupcion

lunes 11 de julio de 2011

Corrupción

Ernesto Ladrón de Guevara

E S evidente que, hasta que los tribunales dicten sentencia condenatoria todo el mundo es inocente o presuntamente culpable. Sin embargo al parecer ese parto de los montes de los socialistas que es la Sociedad General de Autores de España huele a podredumbre. No conozco otra función del tinglado que la de recibir fondos del Gobierno para respaldo mercenario de la farándula improductiva a eso que se llama socialismo y que no es otra cosa que la institucionalización de las prebendas y la redistribución de la riqueza a los amigos y añadidos.

Lo del canon sobre los soportes informáticos no es otra cosa que un impuesto sobre la sospecha de que todo el mundo piratea, lo cual acaba por ser cierto, ya que una vez de que cobran un sobre-precio por una presunción lo lógico es que nos lo resarzamos copiando todo tipo de contenidos por internet. Es una estupidez de tamaño inconmensurable pues trata de atajar el pirateado de productos con propiedad intelectual estimulándolo. Pero lo más grave, si se confirman las imputaciones, es que los beneficiados de esa central de recaudación que es la Sociedad de Autores, de carácter privado, no son los propios productores sino quienes han, supuestamente, desviado los fondos a fines de ilícito penal.

Nadie discute la necesidad de los creadores de proteger su obra y de vivir de su distribución a los usuarios. No cuestiono el deber de cualquier gobernante de proteger la propiedad intelectual o artística, pues, de lo contrario, dejará de haber artistas, escritores, cantantes, actores y de todo aquel que sea capaz de volcar su inteligencia o destreza virtuosa en algo bello. Lo que pongo sobre la picota es la desvergüenza, la picaresca, el aprovechamiento deshonesto del dinero ajeno, la bellaquería. Y de eso estamos sobrados desde que llegó Zapatero y sus muchachos. Estamos rebosados de especimenes de toda índole que se han adherido como sanguijuelas a la piel del Estado, chupando la sangre a los demás. Y luego nos extraña que estemos al borde de la suspensión de pagos, y que según algún rumor que me ha llegado se eche mano a los fondos de la Seguridad Social para pagar la deuda, (espero que sea un mero bulo y no una realidad). A eso es a lo que los ciudadanos nos deberíamos de sublevar, suspendiendo nuestra tributación, incluso, hasta que se restaure el Estado de Derecho y la honradez y moral públicas. No sobre bobadas insustanciales.

No podemos poner las puertas al campo. Estamos en una nueva era, la de las comunicaciones y la cibernética. Igual que muchos sectores del mundo laboral se han tenido que adaptar a este nuevo tiempo, también lo tienen que hacer –por necesidad- los autores, generando nuevas fórmulas de plusvalía y de comercialización de sus productos. Todo menos echar la mano a la caja común.

Por pura higiene.

http://www.vistazoalaprensa.com/firmas_art.asp?id=6176