miercoles 26 de abril de 2006
El Gobierno minimiza los atentados porque tiene «indicios» de que no los ordenó ETA
El Ejecutivo mantiene el calendario que prevé que el jefe del Ejecutivo acuda al Parlamento antes del verano para entablar con su autorización el diálogo con la banda
M. L. G. F.MADRID/SAN SEBASTIÁN. El Gobierno dispone de «indicios» de que los atentados de Barañáin (Navarra) y Guecho (Vizcaya) no obedecen a «una orden de ETA», según le transmitió ayer el presidente del Gobierno a José Antonio Labordeta, diputado de la Chunta Aragonesista, y confirmó el secretario de Estado de Comunicación, Fernando Moraleda.El portavoz gubernamental afirmó que «nos acercamos más» a la confirmación de la tesis de que «no se trata de una orden» de ETA, aunque matizó que debe esperarse a que concluyan las investigaciones policiales que tratan de esclarecer todos los detalles y determinar la autoría de ambos atentados. De haber respondido a una instrucción de la banda, o de Batasuna, admitió que se introducirían «elementos que, sin duda, tienen relieve respecto a la consideración global del proceso de paz».En todo caso, también si -como cree el Ejecutivo- se trata de «acontecimientos aislados y descontrolados», son «situaciones que hay que combatir sin la más mínima excusa, porque la violencia bajo ninguna manifestación tiene cabida en nuestro país». «No hay proceso de paz con violencia», sentenció.El portavoz gubernamental, que compareció tras las entrevistas del presidente del Gobierno con Labordeta y con la diputada de Eusko Alkartasuna Begoña Lasagabaster, sostuvo que, por el momento, «no hay razones» para cambiar el calendario que maneja el Ejecutivo y que, por tanto, Zapatero acudiría al Congreso antes del verano para solicitar la autorización del Parlamento a fin de entablar negociaciones con ETA. No obstante, Moraleda se mostró cauteloso al señalar que «hoy no hay razones (para alterar ese calendario), pero puede haberlas», e insistió en que, previamente, ha de verificarse que el alto el fuego es «una realidad».No constan nuevas cartas de extorsiónEn cuanto a la existencia de otra carta de extorsión de ETA que habría sido enviada tras la tregua declarada por la banda, el secretario de Estado aseguró que el Gobierno no ha tenido conocimiento de este hecho por los cuerpos policiales y que se remite a lo dicho por la patronal vasca, que no tiene constancia de ninguna misiva de este tipo.Mientras que el Gobierno minimizaba así los atentados de Barañáin y Guecho, su benevolente juicio del lunes sobre la actitud de Batasuna tras calificar la fuerza ilegal ambos sucesos de «muy graves» y solidarizarse con las víctimas, topó ayer con un duro juicio de la coalición proetarra sobre la actuación del Ejecutivo. Su portavoz, Pernando Barrena, afirmó -refiriéndose al Gabinete de Zapatero- que «están haciendo las cosas muy mal» y que «van por muy mal camino».Barrena dijo que el Gobierno no está «actuando a la altura de las circunstancias que exigen los nuevos tiempos políticos», porque sigue «dando cobertura» a la aplicación de la ley de Partidos, así como practicando detenciones y encarcelamientos «basados en la persecución política».Juicio dispar de Gobierno y BatasunaA su juicio, la detención el lunes de Sandra Barrenetxea obedece al «mero hecho de su militancia política» y constituye «algo muy grave detrás de lo cual está implicado el Gobierno de Madrid». Agregó que no se trata de «hechos aislados» ni «casualidades» que estén «llevadas a cabo por incontrolados», sino que responden a una «estrategia represiva», lo que puso en contraposición con su consideración de que Batasuna «está actuando con responsabilidad».Por otra parte, el Gobierno rechazó «polemizar» con declaraciones de algunos dirigentes del PP y prefirió mantener el elogio a la actitud «ponderada» de Mariano Rajoy.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario