jueves 24 de abril de 2008
La campaña al rojo
JOSÉ MARÍA CARRASCAL
Ha sido una victoria clara, sólida, la de Hillary en Pensilvania. Pero por puntos, diez, no por K.O. Obama sigue delante en votos y compromisarios, pero Hillary tiene eso tan importante en una carrera como es el acelerón final. De mantenerlo, puede ganar. De ahí la importancia de las próximas primarias y que todos se pregunten ¿Podrá mantenerlo? Para lo que necesita no sólo los votos, sino también el dinero. La campaña está costando un millón de dólares diarios y mientras Obama tiene 40 millones en reserva, Hillary está en números rojos, por lo que necesita donaciones como nosotros la lluvia.
¿Qué ha pasado para que la carrera cambiase de esta forma? Pues varias cosas. La primera, el resbalón de Obama al hablar despectivamente de los pueblerinos frustrados por los problemas económicos. Y Pensilvania está lleno de ellos, que le han pasado factura. A Obama le apoyan los jóvenes y la clase alta, pero tiene un problema con los trabajadores blancos, sin los que le va a ser difícil llevarse la candidatura demócrata. Otro factor es que a medida que avanza la campaña, se apaga el entusiasmo y se imponen las realidades. Obama era, y es, el candidato del cambio, de la esperanza, del idealismo, mientras Hillary es la de los problemas del día. Y estos, la hipoteca, el paro, los precios, pesan cada vez más. Tras lo de Pensilvania, puede decir a los prohombres de su partido: «He ganado en todos los grandes Estados y soy la que puede ganar a McCain». Lo que no va a decirles es que el 26 por ciento de sus seguidores manifiestan que votarán a McCain si ella no es la candidata, y algo parecido ocurre con los de Obama, sobre todo los negros, que acarician la idea de ver a uno de los suyos en la Casa Blanca no como criado. Por último: quienes rechazan a Obama ya tienen una excusa para hacerlo, sin temor a ser tachados de racistas. Así de calientes se han puesto las elecciones norteamericanas.
http://www.abc.es/20080424/opinion-firmas/campana-rojo_200804240257.html
jueves, abril 24, 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario