domingo, noviembre 26, 2006

La mayor movilizacion de la etapa constitucional

Domingo 26 de noviembre de 2006
SEIS MANIFESTACIONES EN CONTRA DE LA CESIÓN A ETA
LA MAYOR MOVILIZACIÓN DE LA ETAPA CONSTITUCIONAL
La movilización social contra la cesión a ETA no tiene precedentes en la etapa constitucional. Con la de este sábado, serán seis manifestaciones en poco más de dos años. Las voces alertando al Gobierno de la oposición cívica a la negociación se cuentan por millones. Hasta ahora, el Ejecutivo de Rodríguez Zapatero ha hecho oídos sordos. Este es el historial de una movilización histórica por la dignidad, la justicia y la memoria de las víctimas.
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Primera. 22 de Enero de 2005. La agresión fantasma de Bono.

La primera manifestación que la AVT celebró el 22 de enero de 2005 ha sido la única que ha contado con la persencia del Gobierno y del PSOE, aunque los manifestantes echaron en falta, y lo dejaron patente, al presidente Zapatero y al comisionado para las víctimas, Peces Barba. La ausencia del ex presidente del Congreso fue comentada ese día por Federico Jiménez Losantos que le dedicó un artículo titulado "Don Tartufo Peces, indigno del cargo". Aquel día, el ministro de Defensa, José Bono, denunció haber sido objeto de una agresión física por la que fueron detenidos ilegalmente dos militantes del PP de Las Rozas. Posteriormente, un juez encontró que la acción policial fue injustificada lo que le valió la imputación a varios policías por detención ilegal. Al final se demostró que la agresión a Bono era fantasma.
El lema de la concentración, a la que los organizadores calcularon que habían asistido entre 25.000 y 32.000 personas, fue "Memoria, dignidad y justicia", pero en su trasfondo estaba la polémica por la prevista excarcelación del sanguinario etarra De Juana Chaos, que el juez Grande-Marlaska evitó procesándolo por nuevos delitos. Al término de la manifestación casi un millar de personas se dirigieron desde la Puerta del Sol a la sede de la Cadena SER, en el número 32 de lacalle Gran Vía. Allí gritaron lemas como "Polanco, cabrón somos un montón", "¿Dónde están los cabrones de la SER?" y "Grupo PRISA, España no se pisa".


Segunda. 4 de Junio de 2005. Las cifras de Constantino Méndez .

Cerca de un millón de personas se manifestaron contra la negociación con ETA al grito de "Constitución, no negociación" y "Zapatero, acércate al PP". Hubo peticiones de dimisión para Peces Barba. Mientras que la AVT cifró en cerca de un millón el número de participantes, la Delegación del Gobierno de Constantino Méndez rebajó el dato hasta los 240.000 y consideró de "alto riesgo" la marcha. "Un millón casi: faltaba el PSOE" fue el artículo que dedicó Jiménez Losantos al éxito de la convocatoria. Telemadrid fue la única televisión que retransmitió en directo la que ya ha quedado para la historia como una de las marchas más multitudinarias de la capital. La ausencia de las otras televisiones fue comentada por Juan carlos Girauta.

Tras la marcha, la periodista Isabel San Sebastián exigió "memoria, dignidad y justicia" en nombre de las víctimas de la banda terrorista ETA y pidió al Gobierno que no negocie con los "asesinos", que escuche el clamor de los asistentes a la manifestación y que "no ignore y olvide a las víctimas". Posteriormente fue el presidente de la AVT, Francisco José Alcaraz, el que leyó otro manifiesto en los mismos términos. Ambos pidieron que se guardara un minuto de silencio en memoria de las víctimas.

Tercera. 25 de febrero de 2006. Dignidad bajo el frío y la lluvia en Madrid.

Más de un millón de personas desafiaron al frío y la lluvia para decir no a la negociación con ETA. La respuesta a la convocatoria de la AVT superó todas las expectativas. La Comunidad de Madrid cifró en 1.400.000 las personas que secundaron la manifestación mientras que la Delegación del Gobierno de Constantino Méndez rebajó esa cifra hasta los 110.000 asistentes. Por esta razón, el Ejecutivo de Esperanza Aguirre pidió la dimisión del delegado Constantino Méndez, por considerar una "burla" su actuación. "Ha sido la manifestación de la dignidad", comentó en un artículo de Cristina Losada.

La manifestación, que discurrió por la calle de Serrano hasta la plaza de Colón, contó con dos cabeceras. La primera de ellas con los dirigentes de la AVT, incluido su presidente, Francisco José Alcaraz, portaba una gran pancarta con el lema de la marcha: "Por ellos, por todos. En mi nombre no". Delante de esta cabecera principal, varias víctimas en sillas de ruedas fueron recibidas al grito de "No estáis solos" por parte de los manifestantes, que corearon también lemas relativos a los presos de ETA: "No son presos, son asesinos" o dirigidos al presidente del Gobierno: "Zapatero, embustero". Unos metros más atrás, en una segunda cabecera, se encontraban políticos del PP como Esperanza Aguirre, Alberto Ruiz Gallardón, Mariano Rajoy o Ángel Acebes.

Cuarta. 10 de Junio de 2006. La estrella de Jinénez Becerril.

Más de un millón de personas colapsaron la Plaza de Colón y sus alrededores, a pesar del sofocante calor del verano madrileño. La Delegación del Gobierno calculó una participación inusitadamente exacta de 242.923 personas; más de las que El País había calculado que caben en la zona. Teresa Jiménez-Becerril resumió el malestar que justificó la protesta: "Enviaré a mis sobrinos a La Moncloa para que les explique por qué está siendo tan complaciente con quienes ordenaron la muerte de sus padres". El secretario de Comunicación del Gobierno de Zapatero, Fernando Moraleda, llamó "hipócrita" al PP por manifestarse en contra del diálogo con ETA y no hacerlo con Aznar.

La plana mayor del Partido Popular hizo acto de presencia en la manifestación para ofrecer su apoyo a las víctimas del terrorismo etarra y para unirse a las cientos de voces que exigieron al Gobierno que "no pague un precio político a ETA". Y es que "las víctimas son necesarias, imprescindibles y fundamentales", dijeron sus líderes. "Hoy sólo existen las víctimas, hoy no existe Gallardón" fue el artículo que dedicó a la concentración Jiménez Losantos.

Quinta. 1 de Octubre de 2006. Decibelios a la ribera del Guadalquivir

Unas 200.000 personas, según los organizadores, pidieron en la capital andaluza a Rodríguez Zapatero que no negocie con ETA y que se investigue hasta dar con todos los culpables del 11-M. Mientras, en un mitin en la localidad madrileña de Alcorcón, el jefe del Gobierno ignoraba a las víctimas e insistía en identificar a la oposición como la "extrema derecha". El escritor Agapito Maestre le dedicó un artículo a Zapatero. Ni el presidente andaluz Manuel Chaves ni el alcalde sevillano Monteisirín acudieron a una manifestación en la que Teresa Jiménez Becerril deseó para sus sobrinos, huérfanos por culpa de ETA, un futuro "presidente del Gobierno en quien puedan confiar, y no uno que siga insistiendo en que pegar tiros es un buen comienzo".

Francisco José Alcaraz aseguró tras la protesta que "el Gobierno ha sido miserable, cobarde y traidor" desde que los terroristas declararan el "alto el fuego". Uno de los hechos más comentados fue la provocación de Juan José López Garzón, delegado del Gobierno en Andalucía, que avisó de que vigilaría el nivel de decibelios de la manifestación.


TAMBIÉN DELIMITA EL ESPACIO FÍSICO DE LA MANIFESTACIÓN
(18-09-06) El Gobierno controlará el volumen de los gritos de protesta en la próxima manifestación de la AVT en Sevilla
Las víctimas del terrorismo saldrán a la calle el próximo 1 de octubre en Sevilla para censurar la negociación del Gobierno Zapatero con ETA. Una vez anunciado el lugar donde se celebrará el acto y solicitados los permisos correspondientes, las víctimas han visto cómo el Delegado del Gobierno en Andalucía, Juan José López Garzón, no sólo les limita el espacio físico que puede ocupar la manifestación, sino, incluso, los decibelios que pueden alcanzar los gritos de protesta, tal vez para evitar las "actitudes vociferantes" que Conde-Pumpido denunció en otros actos.

(Libertad Digital) La Administración del Estado se está esforzando en poner las mayores trabas posibles a la manifestación que el próximo 1 de octubre recorrerá las calles de Sevilla para protestar nuevamente contra la negociación entre el Gobierno Zapatero y la organización terrorista ETA.

Así, la delegación del Gobierno, dirigida por Juan José López Garzón, ya ha informado a las víctimas del terrorismo las "recomendaciones" a las que tendrá que "ajustarse" para poder celebrar el acto. Entre estas recomendaciones se acota de forma importante el espacio que se puede utilizar de las calles por la que transcurrirá la manifestación.

"La manifestación comenzará a partir del cruce del Paseo de las Delicias con la Avenida de Roma, de manera que el tráfico entre el Puente de San Telmo y la Avenida de Roma no quede obstaculizado, permitiendo así la evacuación del tráfico rodado. A lo largo del recorrido, se deberá dejar expedito un carril de circulación de doble sentido, para el paso de transportes públicos y servicios de emergencia".

Pero no sólo se recortan espacios, sino también se indica con volumen se podrán lanzar las proclamas contra el Ejecutivo. "El uso de la megafonía, música, etc. Deberá adaptarse en todo momento a las prescripciones de las Ordenanzas municipales, no rebasando los límites máximos de emisión sonoro permitidos por éstas", advierte la Delegación del Gobierno.

A través de un comunicado, las víctimas llamaron a todos los ciudadanos a acudir a la marcha que discurrirá el próximo día 1 de octubre bajo el lema "Rendición en mi nombre, no" para "poner de manifiesto la voluntad mayoritaria de la sociedad española, contraria sin paliativos a que se realicen concesiones a los asesinos, y, en definitiva, a que el Gobierno de la Nación pague un precio político a los terroristas", porque, "permitir impunemente lo anterior supondría la mayor afrenta posible a la memoria de las víctimas del terrorismo, y, por lo tanto, doblegar nuestro Estado de Derecho a los designios de un grupo de criminales".

Recuerdan que "los recientes acontecimientos en el País Vasco y en la propia Audiencia Nacional demuestran que la actitud del Gobierno de la Nación conduce a trasmitir una imagen de debilidad frente a los terroristas, quienes además de continuar desarrollando periódicamente actividades de terrorismo callejero, así como extorsionando sistemáticamente a empresarios y profesionales, se permiten desafiar la legalidad vigente y lanzar amenazas a los jueces y tribunales, así como a los gobiernos de España y Francia", por lo que "consideramos que la actual situación refleja de manera nítida el proceso de rendición del Estado de Derecho frente a los asesinos de Batasuna-ETA, y queremos animar a la ciudadanía a que lleve a cabo una verdadera rebelión cívica frente al despropósito encabezado por el Sr. Rodríguez Zapatero", concluyen.


ZP y las víctimas de ETA
Rodríguez en Alcorcón
Agapito Maestre

Rodríguez "de" Alcorcón mostró su auténtica cara. Estamos ante un "pequeño" dictador. Estamos ante un político totalitario. Estamos ante alguien que niega la esencia de la democracia: el debate. Ya no usa la palabra diálogo.

La violencia en España lo ocupa todo. Las víctimas se rebelan civilmente contra esa violencia institucionalizada, pero los medios le prestan poca atención antes y después de la manifestación de Sevilla. Casi todos están ya al servicio del poderoso. En ese contexto de violencia callada contra las víctimas, Rodríguez va a Alcorcón para amenazar. Su "mitin" de Alcorcón causa pavor. Sus palabras traen miedo por todas partes. Él lo sabe. Él lo quiere. Lejos quedó el tiempo de la persuasión para este señor de Alcorcón, a él le basta con la intimidación. Él impone que no haya oposición.
Juega fuerte. No, no, no es cobarde. Sólo ventajista. Yo lo espero. Está en el bando de la destrucción. Los otros, los medios, los jueces, la policía, el ejército, las instituciones, sí, lo que queda de instituciones "pseudo-democráticas" lo respaldan. Lo siguen. Trae a Garzón de EEUU. Silencia a los disidentes, por decir algo, de su partido. Manda a la caverna a quien le apetece. Él se sabe, se siente, respaldado por el brazo fuerte de Caín. Fue a Alcorcón a asustar a los muertos, a las víctimas de ETA y también a las del 11-M. Fue a Alcorcón a reventar el acto de rebelión cívica de Sevilla, pero no lo consiguió. Y de paso, así es de trapacero el personaje, arremetió contra la oposición.
Rodríguez "de" Alcorcón flotaba respaldado por la violencia. La sangre de los españoles caídos sólo eran números, estadística, pura abstracción para este político sin escrúpulos, que seguramente ya habría firmado la independencia del País Vasco, si no fuera porque esa misma sangre lo retiene. No oía, no quería oír, los testimonios de las víctimas concretas. Parapetado en su policía "política", en sus jueces "políticos", en su partido "político", en su programa totalitario de hacer coincidir su "verdad" con la de los jueces y los "científicos", Rodríguez niega la vida, la falta de vida, concreta y singular. No quiere oír hablar de la muerte concreta del guardia civil Indiano, o del matrimonio Jiménez-Becerril, o de cualquier otro. Él sólo habla de la muerte en abstracto. Todo para este sujeto está sometido a ideología. La abstracción le impide ver la vida, la vida lesionada, de miles de seres humanos que no están dispuestos a seguir muriendo por el terror y viviendo de rodillas ante el asesino.
Rodríguez "de" Alcorcón mostró su auténtica cara. Estamos ante un "pequeño" dictador. Estamos ante un político totalitario. Estamos ante alguien que niega la esencia de la democracia: el debate. Ya no usa la palabra diálogo. Él lo ha remplazado por la mera polémica. Ya ni se refiere a las víctimas del terrorismo. Las ignora o las maltrata. Ya no se dirige únicamente a sus correligionarios, partidarios y simpatizantes, sino a los votantes de la oposición para que desoigan las políticas democráticas de la oposición. Ahí está el mejor Rodríguez, oponiéndose a nombrar las cosas por su nombre, proyectando sobre sus adversarios sus maldades. No soporta que la oposición sea oída y la estigmatiza. Quiere ser solo. Este hombre no ha perdido el juicio, sino que ha saltado todas la barreras de la política democrática.
Pero ni siquiera esa plática totalitaria consiguió hacernos olvidar que el domingo sólo hubo un acto cívico, político, en toda España. Lo protagonizaron los muertos, los caídos, las víctimas de la democracia. Sin sus historias concretas, sin sus testimonios, recogidos el domingo en Sevilla, los ciudadanos de España no seríamos nada. Al lado de las víctimas, toda la verborrea de Rodríguez "de" Alcorcón es miseria de alguien que no entiende que los muertos de España, los muertos de la democracia, los asesinados por el terrorismo no dejan respirar normalmente a los políticos, especialmente a los políticos cobardes, que juegan con la sangre derramada para mantenerse en el poder.


PIDE A LOS ELECTORES DEL PP QUE "RESPONDAN"
(01-10-06) Zapatero sortea los escándalos policiales acusando a una "extrema derecha" que cuestiona las instituciones
José Luis Rodríguez Zapatero ha vuelto a identificar toda forma de oposición con una "nueva extrema derecha". El presidente se desentiende de los escándalos que se acumulan en el Ministerio del Interior y señala a su recurrente chivo expiatorio como el culpable del descrédito de los mandos policiales, del PSOE y de su Gobierno por los informes manipulados sobre el 11-M, las detenciones políticas de afiliados del PP y el chivatazo a ETA. A juego con la teoría de una "trama de conspiradores" que ha instigado desde la "derecha extrema" estos escándalos, según la expone El País, Zapatero se ha permitido dirigirse este domingo al electorado "conservador" para pedirle que "no se deje llevar" por la "extrema derecha" y "respondan" a la fantasmal conspiración, porque está en juego, dijo, la confianza en "la tarea de la Policía, la Guardia Civil y la Justicia".

LD (Efe) El presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, subrayó este domingo en Alcorcón la confianza de los ciudadanos en "la tarea de la Policía, la Guardia Civil y la Justicia", instituciones "que por mucho que algunos lo intenten tienen un gran prestigio porque sirven al Estado de Derecho y a la democracia". Además, pidió a los conservadores que "no se dejen llevar" por "la extrema derecha" y que "respondan".

Ante más de 4.500 personas que llenaron el polideportivo de Alcorcón (Madrid), en un acto que sirvió de 'espaldarazo' del líder socialista madrileño, Rafael Simancas, en su carrera a la Presidencia de la Comunidad, el jefe del Ejecutivo realizó esta afirmación justo antes de exponer que la derecha está "atrapada en falsedades porque no pueden presentar ningún proyecto a los españoles".


ZAPATERO, CHAVES Y EL PSOE IGNORAN LA MARCHA DE MILES DE PERSONAS CONTRA LA NEGOCIACIÓN
Las víctimas claman en Sevilla por "un presidente en quien poder confiar" para derrotar a ETA y saber la verdad del 11-M
Otro clamor contra el terrorismo, la misma indiferencia oficial. Unas 200.000 personas, según los organizadores, o 300.000, según la COPE, han pedido en Sevilla a José Luis Rodríguez Zapatero que no negocie con ETA y que se investigue hasta dar con todos los culpables del 11-M. En Alcorcón, donde daba un mitin, el jefe del Gobierno ignoró a las víctimas e insistió en identificar a la oposición como la "extrema derecha". Ni Chaves ni el alcalde Monteisirín acudieron a una manifestación en la que Teresa Jiménez Becerril deseó para sus sobrinos, huérfanos por culpa de ETA, un futuro "presidente del Gobierno en quien puedan confiar, y no uno que siga insistiendo en que pegar tiros es un buen comienzo". Acebes, Astarloa, Teófila Martínez y Arenas han representado al PP. El presidente de la AVT anunció nuevas manifestaciones, hasta que se escuche a las víctimas.

(Libertad Digital) La manifestación convocada por la AVT en Sevilla, con los lemas Negociación, en mi nombre, no y Queremos saber la verdad, ha sido un éxito evidente. Según estimaciones no oficiales, entre 300.000 y 400.000 personas han marchado este domingo por las calles de la capital andaluza.

A esa hora del mediodía, Rodríguez Zapatero ofrecía un mitin en Alcorcón, sin hacer ninguna referencia a la petición de las víctimas de ETA y de miles de ciudadanos que las apoyan. El presidente ha vuelto a esparcir, eso sí, su odio a toda forma de oposición a su Gobierno –a la que ahora se refiere, en todos los mítines, como "extrema derecha"–, y ha rescatado el recuerdo de las manifestaciones contra la Guerra de Irak como su ejemplo de civismo más a mano. Zapatero dijo que el cambio de Esperanza Aguirre por Rafael Simancas simbolizará la superación del recuerdo del "sudor de lágrimas" de las manifestaciones de 2003 contra el PP y "devolver a Madrid la sonrisa".

En Sevilla, mientras tanto, la hermana del concejal del PP Alberto Jiménez Becerril, asesinado por ETA, ha vuelto a impartir una lección de dignidad, verdad y belleza con su testimonio a la multitud reunida por la AVT.

Teresa Jiménez Becerril se refirió a la provocación del delegado del Gobierno en Andalucía, que avisó de que vigilaría el nivel de decibelios de la manifestación anti-ETA. "Desde que mataron a mi hermano y mi cuñada, he intentado pensar en quienes lo hicieron, pero sólo me sale gritarles: asesinos", dijo, entre un estruendo de "asesinos, asesinos" que la secundó desde la muchedumbre.

La hermana del concejal asesinado por ETA sostuvo que el hecho de que "una banda terrorista asesine a una persona sería motivo suficiente para que cualquier Gobierno le cerrara la puerta a ETA. En cambio", advirtió Teresa Jiménez, "hemos visto que esas puertas están abiertas de par en par y lo próximo será ver a los señores Otegi y [Patxi] López pasearse de la mano por Europa".

Frente a la prepotencia del Mal, Teresa Jiménez ofreció el testimonio de su reciente viaje al Parlamento Europeo, como parte de una delegación de víctimas, y lamentó "lo triste que es ir mendigando a un belga, a un irlandés o a un inglés un poco de comprensión. Si Europa no sabe distinguir entre un terrorista y mi hermano Alberto, yo no quiero ser europea".

Jiménez Becerril denunció el abandono de la causa de las víctimas por parte de los europarlamentarios socialistas. Ninguno excepto Rosa Díez, reconoció, "vino a hablar con nosotros. ¿Y saben por qué? Porque no quieren venir donde estamos nosotros. No quieren ver el horror. Nosotros representamos la memoria viva de las víctimas de ese horror".

Desgarradora y directa, conmovedora y sincera, Teresa Jiménez Becerril tuvo palabras también para el presidente de la Junta de Andalucía y para el alcalde de Sevilla, ambas socialistas. "No sé si estarán entre nosotros", dijo la hermana de Alberto Jiménez Becerril, "pero no creo porque no sería coherente abrazar a mi madre cuando la están traicionando por la espalda".

Una de las manifestantes, en declaraciones a COPE, pidió la dimisión de Alfredo Sánchez Monteseirín como presidente de la Fundación Jiménez Becerril, cargo que desempeña en calidad de alcalde de Sevilla.

Teresa Jiménez tuvo palabras de aliento para sus sobrinos huérfanos. "Espero que tengan un presidente del Gobierno en quien puedan confiar, y no uno que siga insistiendo en que pegar tiros al aire es un buen comienzo", dijo, refiriéndose al último comunicado a tiros de ETA.

Invocó a Rodríguez Zapatero, para decirle: "Mis sobrinos son niños, pero no tontos, así que tenga el valor de explicarles qué está negociando usted con ETA", concluyó entre una clamorosa ovación.

Los siguientes oradores en subir a la tribuna fueron Gotzone Mora, concejal socialista de Getxo y una de las activistas más destacadas contra el terrorismo y la "obligatoriedad nacionalista", tal y como se refirió al dogma imperante en el País Vasco; Gabriel Moris, vicepresidente de la AVT y padre de una de las víctimas del 11-M, que volvió a exigir conocer la verdadera autoría de la peor masacre terrorista de la historia de España, y, por último, el presidente de la AVT, Francisco José Alcaraz, que celebró el éxito de la convocatoria y anunció que seguirán manifestándose hasta que el presidente abandone su política de cesión a los terroristas.

Manifestantes de distintas comunidades españolas

La manifestación convocada en Sevilla por la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) para mostrar la "rotunda oposición" al proceso de "cesión-negociación" entre "Batasuna-ETA" y el Gobierno comenzó en torno a las 12.35 horas en el paseo de las Delicias de la capital hispalense.

La marcha estuvo encabezada por el presidente de la AVT, Francisco José Alcaraz; la víctima de un atentado terrorista, Irene Villa; la hermana de el concejal sevillano asesinado por ETA, Alberto Jiménez Becerril, Teresa Jiménez Becerril; además de otros muchos miembros de la asociación.
A esta concentración, también acudieron, "para mostrar su apoyo a las víctimas", los principales dirigentes del PP nacional y regional, como el secretario general, Ángel Acebes, el secretario de Libertades y Justicia, Ignacio Astarloa, y el presidente andaluz, Javier Arenas, entre otros.

Los numerosos manifestantes llegados desde todos los rincones del país, caminaron de manera pacífica por las calles hispalenses portando banderas de España y de Andalucía, y coreando consignas en contra de la actuación del Gobierno en la negociación con ETA.

"Están atrapados en las falsedades desde hace algún tiempo, falsedades como lo que nos contaron del 11 al 14 de marzo y ahora más falsedades para intentar reparar su derrota electoral, limpia y contudente", enfatizó Zapatero.

Con ello, remarcó que en democracia "esconderse y atraparse en las falsedades sólo representa perder el tiempo ante la ciudadanía y que el proyecto del PP tardará más tiempo en renovarse y ser una oferta creíble". Con esta premisa, subrayó que es su "obligación" decir a los ciudadanos conservadores de España que han contribuido "decisivamente a la transición democráctica" que "no se dejen llevar y que respondan". "Que no se dejen llevar por la derecha extrema", señaló.

El acto contó con la presencia de la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega –que subió al estrado antes del inicio del acto junto a Zapatero, Simancas, y el alcalde de Alcorcón, Enrique Cascallana–, el ministro de Defensa, José Antonio Alonso, y miembros de la Ejecutiva Federal del partido como Pedro Zerolo y Diego López Garrido.

Hoy sólo existen las víctimas, hoy no existe Gallardón
Federico Jiménez Losantos

Al paso de Gallardón, ni un insulto, ni una injuria, sólo un silencio sepulcral y despectivo

El montaje victimista de Gallardón, incluido su calculado ataque de histeria judicializada contra mí, alcanzaría un gran éxito si hoy fuera objeto de una reprobación tumultuosa y tumultuaria, no digamos ya si su provocación consiguiera un par de capones para abrir los telediarios. Ante la provocación hay que responder con inteligencia, no como quiere el provocador sino como nos conviene a los provocados. Tenemos constancia de que algunos grupos de extrema izquierda y algún grupo de la extrema derecha permeado y manipulado por la Policía podrían intentar hoy deslegitimar la manifestación, la causa de las víctimas y de la dignidad nacional montando un numerito de agresión o de gran reprobación al alcalde de Madrid o a cualquier otro medio de Prisa. No hay que hacerles el juego. Hoy y siempre, una manifestación de la AVT es para lo que la ha convocado la AVT. Nada más. Y nada menos.
Zapatero está contra la pared y Polanco al descubierto. Las vacilaciones de Rajoy han permitido a Gallardón acariciar la idea de un partido maduro para caer en sus garras. Eso no sucederá. Pero no es hoy el día de demostrárselo. Tampoco de facilitar la enésima operación de desprestigio contra la AVT, el PP o la COPE. Al paso de Gallardón, ni un insulto, ni una injuria, sólo un silencio sepulcral y despectivo. Ya tendremos días para hablar largo y tendido de ese sujeto, de ese cáncer de la derecha española, de ese agente doble, de ese hijo político de Vellido Dolfos. El lunes, sin ir más lejos, desde las seis de la mañana. Pero hoy, no; hoy, el peor desprecio es no hacer aprecio. Gallardón no existe. Sólo existen las víctimas del terrorismo, España y nuestra libertad. A Gallardón ni caso.


DICE QUE "EL PAÍS, HOY Y MAÑANA, SEGUIRÁ QUERIENDO LA PAZ"
(10-06-06) Moraleda llama "hipócrita" al PP por manifestarse en contra del diálogo con ETA y no hacerlo con Aznar
Si en la mañana de este sábado Zapatero sólo hacía referencia a la manifestación de la Asociación de Víctimas del Terrorismo para hacer bromas sobre la "práctica de manifestarse de la derecha", Fernando Moraleda ha llamado, una vez finalizada la multitudinaria concentración, "hipócritas" a los populares. Según el secretario de Estado de la Comunicación, el PP se manifiesta ahora contra el diálogo con ETA pero no lo hizo cuando el Ejecutivo de José María Aznar dialogó con la banda. Moraleda ha expresado la seguridad que tiene el Gobierno de que "el país, hoy y mañana, seguirá queriendo la paz".

L D (EFE) El Gobierno aunque ha expresado este sábado su respeto a las víctimas del terrorismo tras la concentración de Madrid, asegura que la mayoría de españoles quiere la paz y lamenta, lo que para ellos es, la "hipocresía" del PP por manifestarse ahora contra el diálogo con ETA y no lo hiciera cuando el Ejecutivo de José María Aznar dialogó con la banda.El secretario de Estado de Comunicación, Fernando Moraleda, hizo estas consideraciones al término de la concentración convocada por la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) que tuvo lugar en la Plaza de Colón de Madrid en contra del diálogo con ETA y para exigir "toda la verdad" sobre los atentados del 11-M. Moraleda ha expresado el convencimiento del Gobierno de que la mayoría de los ciudadanos quiere la paz. El secretario de Estado ha subrayado que las víctimas del terrorismo merecen todo el respeto, pero ha adevertido de que "los que utilizan su dolor, merecen la mayor reprobación".Ante la presencia de la cúpula del PP, con su presidente, Mariano Rajoy, a la cabeza, en la concentración de este sábado en Madrid, Moraleda se pregunta por qué los representantes de esta formación política no hicieron lo mismo en 1998 y no se manifestaron "cuando Aznar negociaba con ETA". "La hipocresía en política responde más a intereses partidistas que al interés general del país", dice el representante del Gobierno. Además, Moraleda ha expresado la seguridad que tiene el Gobierno de que "el país, hoy y mañana, seguirá queriendo la paz".
Saura dice que "es absolutamente necesario apoyar" a Zapatero
El presidente de ICV, Joan Saura, sólo se ha referido a la manifestación de la AVT para condenar lo que llama "instrumentalización de las víctimas del terrorismo" que, a su juicio, ha realizado el PP con el único fin de favorecer "los intereses del partido". "Es una irresponsabilidad por parte del PP que en temas como el terrorismo confronte en la calle políticas", ha manifestado Saura tras un acto con jóvenes a favor del Estatuto catalán que ha celebrado la federación ICV-EUiA en el centro cultural Can Fabra de Barcelona.El líder ecosocialista ha subrayado que es "absolutamente necesario apoyar" al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero en este "proceso de paz" porque representa "una oportunidad histórica" para alcanzar la paz en el País Vasco.


EN 2003 ESTIMÓ EN UN MILLÓN EL PÚBLICO DE UN ACTO DEL PAPA EN LA PLAZA DE COLÓN
(10-06-06) EL PAÍS Y SU GUERRA DE CIFRAS: SÓLO CABEN 200.000 DONDE ANTES CABÍA UN MILLÓN
El diario El País asegura este sábado que la madrileña Plaza de Colón es "un espacio para la protesta donde caben 200.000 personas". Hace tres años, durante la canonización que realizó el Papa Juan Pablo II, el diario del grupo Prisa dio por buena la estimación oficial de un millón de personas reunidas en la Plaza de Colón. El 5 de mayo de 2003, publicó: "Una muchedumbre estimada en un millón de personas rodeó ayer al Papa durante la ceremonia de canonización de cinco españoles en la plaza Colón, de Madrid".

(Libertad Digital) El diario independiente asumió en mayo de 2003 un dato que tres años después no conviene a su objetivo editorial de subestimar a toda costa la capacidad de movilización de las víctimas del terrorismo contra la negociación del Gobierno y del PSOE con Batasuna-ETA.

El diario El País publica este sábado una información acompañada de una infografía en su página 18 en la que se asegura que la madrileña Plaza de Colón es "un espacio para la protesta donde caben 200.000 personas". "

La plaza de Colón y sus aledaños tienen, según mediciones oficiales, un espacio útil para su ocupación por parte de personas de 68.540 metros cuadrados. Con máxima concentración, en ese lugar cabrían 205.620 personas (a razón de tres por cada metro cuadrado)", asegura el "diario independiente".

El 5 de mayo de 2003, el rotativo progresista publicó: "Una muchedumbre estimada en un millón de personas por la Delegación del Gobierno rodeó ayer al Papa durante la ceremonia de canonización de cinco españoles en la plaza Colón, de Madrid. Fue el acto central de la quinta visita a España de Juan Pablo II, quien instó a los españoles a mantener sus "raíces cristianas" y hacerlas valer en la construcción europea, como "evangelizadores" de la nueva UE de 25 miembros. El Pontífice recibió al líder del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, almorzó con la Conferencia Episcopal y se reunió con la Familia Real, antes regresar a media tarde a Roma. No fue un adiós, sino un hasta luego. "Habrá que fijar fecha para la sexta visita", le dijo el Papa a la Reina.


BECERRIL: "QUE EXPLIQUE A MIS SOBRINOS POR QUÉ COMPLACE A LOS ASESINOS DE SUS PADRES"
Más de un millón de personas vuelven a pedir en la calle a Zapatero que derrote a ETA
Por cuarta vez en dos años, una muchedumbre se ha echado a la calle para exigir al Gobierno que derrote a ETA. Más de un millón de personas han colapsado la Plaza de Colón y sus alrededores, en Madrid, a pesar del sofocante calor y del reclamo del mundial de fútbol televisado. La Delegación del Gobierno ha calculado una participación inusitadamente exacta de 242.923 personas; en todo caso, más del doble de lo que concedió a la manifestación del pasado 25 de febrero y más de las que El País había calculado que caben en la zona. Teresa Jiménez-Becerril resumió el malestar que justificó la protesta: "Enviaré a mis sobrinos a La Moncloa para que les explique por qué está siendo tan complaciente con quienes ordenaron la muerte de sus padres". Zapatero, por boca de Fernando Moraleda, ha repetido su retórico respeto por las víctimas pero no ha adoptado ningún compromiso.

(Libertad Digital) Las palabras del presidente de la AVT, Francisco José Alcaraz, han cerrado la multitudinaria concentración. Alcaraz ha dicho que "este Gobierno ha gastado más fuerza en intentar hundir y desprestigiar a la AVT que en luchar contra los terroristas". Además, "el presidente de la AVT ha criticado al movimiento rosas blancas por la paz -que ha entregado una de esas rosas a una abogada de Batasuna- por "igualar a las víctimas y los verdugos" y les ha dicho que el próximo día 29 de junio "tendrán oportunidad de ser valientes" y acudir al juicio que se va a celebrar en la Audiencia Nacional por el asesinato de Miguel Ángel Blanco, para entregar allí una de esas rosas blancas, "manchadas de sangre de las víctimas".

Francisco José Alcaraz también ha recordado que "la Justicia es un pilar fundamental para nuestra convivencia" y que "si la política entra en la Audiencia Nacional, la justicia va a salir por la ventana y con ella todas nuestras esperanzas". Así, ha pedido a los jueces, "que conocen como son estos asesinos y como se ríen de sus víctimas", que los juzguen "como se merecen". "Ayer la señora De la Vega afirmó que el terrorismo ya no existe y que esta manifestación ya no es necesaria. Y si no existe el terrorismo –se ha preguntado Alcaraz­­– porque se empeña en arrodillar a todo un estado de Derecho ante una banda terrorista", ha afirmado.

La cuarta concentración en menos de un año por el mismo motivo

Sobre las 17.00 horas, los primeros dirigentes populares llegaban al lugar de la concentración encabezados por Mariano Rajoy. Entre ellos, Eduardo Zaplana, Ignacio Astarloa, Ana Pastor, Miguel Arias Cañete, Francisco Camps, presidente de Valencia y Miguel Sanz, presidente de Navarra. (Ampliación)

Se trata de la cuarta movilización en menos de un año y medio –primera tras el alto el fuego anunciado por ETA– en contra de la negociación con la banda terrorista, aunque en esta ocasión al rechazo del diálogo han sumado la exigencia de conocer todo lo ocurrido en los atentados del 11 de marzo de 2004.

Debido al calor, los más demandados fueron los paraguas del Foro de Ermua, a 20 euros, con la banderas de España y la ikurriña sobre un fondo blanco. En algunas pancartas portadas por los manifestantes se podían leer protestas contra el Gobierno: "España no se merece un presidente felón", "España no merece un Gobierno ZP", o "¿Porqué odias a España?, Zapatero".

"Queremos saber la verdad"

Tras una breve intervención de la periodista Isabel San Sebastián, ha tomado la palabra Gabriel Moris, vicepresidente de la AVT, que ha saludado a los cientos de presentes y les ha agradecido su presencia en "este acto cívico" a favor de "la verdad, la justicia, y la libertad". Ha manifestado cómo él y su familia son la voz de su hijo que "sufrió las consecuencias del terrorismo".

"Lo que hoy pedimos y exigimos, con los miembros de la sociedad civil" a nuestros representantes políticos es que se esclarezca la verdad "ya que en estos trenes íbamos todos, todos somos victimas potenciales de los atentados". "Nuestra presencia es un ejercicio de libertad ciudadana y de democracia", ha afirmado Morís, porque "¡queremos saber la verdad!", ha reafirmado el vicepresidente de la AVT, en referencia a los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid. Su afirmación ha sido secundada por los presentes, con grandes aplausos.

María del Mar Blanco, hermana de Miguel Ángel Blanco, asesinado por ETA y punto de inflexión en la lucha contra el terrorismo con el Espíritu de Ermua, ha recordado al Gobierno que "no se puede ceder nada porque de lo contrario será rentable asesinar, secuestrar y extorsionar. Hemos aguantado demasiado y nos sentimos contrariados porque el Gobierno de España pueda sentarse a negociar con los que nos han amargado la vida tantos años". "No puede haber ninguna contraprestación, ni política ni moral. Hemos aguantado demasiado y no podemos soportar que nuestros asesinos puedan conseguir, sin matar, lo que no han conseguido matando. Ellos son los asesinos y nosotros la parte inocente, y el Gobierno de este país parece que no lo tiene claro", ha afirmado.

Javier Gismero, militar herido en el 11M, pidió una "actuación determinante" para saber la verdad sobre "el mayor atentado terrorista jamás perpetrado en España". Gismero dijo que "son demasiados los enigmas" sin resolver sobre la autoría de aquel atentado, dentro de un "proceso judicial carente de rigor". Reclamó una "investigación seria, eficaz, no deslegitimada por intereses políticos y no sometida a un permanente obstruccionismo"

Teresa Jiménez-Becerril, hermana de un concejal del PP asesinado junto a su esposa por ETA en Sevilla, en 1998, transmitió a Zapatero que no tiene su "bendición para buscar una paz como sea" y se ofreció a enviarle a sus sobrinos al palacio de La Moncloa para que les explique "por qué está siendo tan complaciente con quienes ordenaron la muerte de sus padres".

Horas antes de celebrarse esta multitudinaria manifestación, un centenar de familiares y personas afectadas por el terrorismo viajaron en tres autobuses con dos rutas diferentes: una seguía el trayecto de las explosiones del 11-M, y otra, el de algunos atentados perpetrados por ETA. En cada uno de estos lugares se depositaron cestas de margaritas blancas, se pronunciaron palabras de homenaje y se guardó un minuto de silencio. De esta forma, la AVT ha querido recordar a las víctimas y refrescar la memoria de la ciudadanía ante la negociación del Gobierno con la banda terrorista. (Ampliación)

El vicepresidente segundo y consejero de Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid, Alfredo Prada, ha cifrado en "alrededor de un millón de personas" la asistencia a la concentración que se ha celebrado en la madrileña Plaza de Colón contra la negociación entre el Gobierno y la banda terrorista ETA y para exigir "toda la verdad" del 11-M. Sin embargo, según la Policía, sólo han asistido 242.923 personas.

La Comunidad ha explicado, en un comunicado, que ese es el cálculo que han hecho quince especialistas de las direcciones generales de Seguridad y Protección Ciudadana, que "han estado desplazados en el lugar de la concentración y determinaron la ocupación de la plaza y las calles adyacentes". Además, Prada ha dicho al término de la concentración que ésta se había producido dentro de una "normalidad absoluta".


Manifestación de la AVT
Dignidad bajo la lluvia
Cristina Losada

"Si no hay vencedores ni vencidos, hay vendedores y vendidos", han escrito sobre una bandera andaluza. Otros: "Dignidad y justicia. No humillación". "No es una guerra, son crímenes, son asesinatos".

A las cinco, en la plaza de los delfines, que es como se conoce en Madrid a la plaza de la República Argentina, un cielo plomizo auguraba que la manifestación de la AVT iba a vérselas con otro obstáculo, añadido al del silencio mediático habitual. En junio, hubo un sol de justicia y ahora, frío y una lluvia helada que pronto empezaría a descargar. No, el tiempo no lo puede encargar el gobierno, eso todavía se le escapa; pero parece que se confabula para endurecer las condiciones y requerir de los ciudadanos una firme voluntad de asistir. Este 25 de febrero en Madrid hacía falta tenerlo muy claro para acompañar a las víctimas del terrorismo en su marcha contra la negociación con ETA, contra un falso "proceso de paz", que ya está jalonado de cesiones.
A las cinco, en la plaza, la pregunta era obligada: ¿seremos más o menos que en junio? Había que subirse a la fuente, y hubo quien terminó cayéndose al agua, para darse cuenta de que Serrano abajo, ya había un mar humano. La cabeza de la manifestación había tenido que salir, presionada por la corriente de un río, que no cesaba de recibir afluentes. Durante un largo rato, el mar permaneció quieto, a la espera de tener cancha para moverse. Dominaba en su superficie un símbolo: la bandera de España. La gente también tenía esto claro: el cambalache con los de ETA es un eslabón del desguace de la nación de ciudadanos.
Y los ciudadanos se disponen a resistir. De momento, donde estamos, se oyen pocas consignas. Estos manifestantes, al contrario que otros, no son proclives a reducir a una frase propagandística lo que piensan y sienten. Entre el bosque de banderas españolas, surgen carteles y pancartas de fabricación casera. "Si no hay vencedores ni vencidos, hay vendedores y vendidos", han escrito sobre una bandera andaluza. Otros: "Dignidad y justicia. No humillación". "No es una guerra, son crímenes, son asesinatos". "España no se merece un gobierno que miente. Queremos saber. 11-M". Y otro cartel, pequeño, imaginativo: "Zin Principios".
Hay un par de pancartas en inglés, para que se enteren los medios extranjeros: "Our P.M. lies" (Nuestro primer ministro miente); "Zapatero surrenders to terrorism". A las seis y diez se han abierto los paraguas. Apenas se puede caminar. Los móviles ya no tienen cobertura. Cuando se pasa por delante de alguna cámara, se impone el lema: "Luego diréis que somos cinco o seis". La gente ya se conoce el percal. Dirán también, todos lo sabemos, que es una mani de "pijos", de gentes de Serrano y del barrio de Salamanca. Pero allí hay de todo. De todas las edades y de toda condición. Gente con paraguas, gente que se ha puesto una simple bolsa de plástico en la cabeza, gente que se moja.
Desde la terraza de un edificio, un grupo de adolescentes agitan una bandera española y gritan: "España unida jamás será vencida". Eso sí que lo corea la gente, que de vez en cuando rompe el silencio: "Zapatero, embustero", "Zapatero dimisión". Y sobre todo: "España se merece otro presidente". Cada tanto, se extiende por la manifestación un coro de "España, España".
A las siete aún estamos pasando por delante de la iglesia donde ETA cometió el atentado contra Carrero Blanco. Hay un paño blanco colgado de una de las ventanas. A estas alturas ya se ha corrido la voz de las cifras que está dando la Comunidad de Madrid. Un grupo da vivas a la COPE. Otro corea: "¡Federico Jiménez Losantos!". Desde la acera, unos cuantos llaman a Cándido. "¡M-A-L-O!". Es éste de los pocos momentos que arrancan sonrisas. Y cuando algunos corean: "Donde están, no se ven, Almodóvar y Bardem". No, no se canta bajo la lluvia. Es una manifestación seria, de semblantes preocupados, de indignación contenida.A las siete y media se hace imposible avanzar. La cabeza ha llegado a la plaza de Colón. La gente se escurre por las calles laterales. Otros se refugian donde pueden, hasta debajo de las paradas de autobús. Se va la luz en la calle Serrano y se oyen gritos: "¡Montilla!". Vuelve a funcionar el alumbrado ante la admonición. Desde Goya podemos oír la intervención de Alcaraz. Es el momento de la emoción contenida, de los aplausos que avalan la determinación de quien da voz a las víctimas del terrorismo y a todas las gentes de bien. Ha sido la manifestación de la dignidad.


CALCULÓ 110.000 MANIFESTANTES FRENTE A 1.400.000 DE LA COMUNIDAD
(25-02-06) El Gobierno de Aguirre pide el cese del delegado del Gobierno por considerar "una burla" su cifra de asistentes
La Comunidad de Madrid ha pedido el cese del delegado del Gobierno en la región, Constantino Méndez, al considerar "una burla" su cifra de asistentes a la manifestación de la Asociación de Víctimas del Terrorismo en contra de una negociación con ETA. Los datos de la Delegación hablan de 110.000 asistentes frente al 1.400.000 personas que calcula el Ejecutivo regional y el 1.750.000 que barajan los organizadores. Bajo el lema "Por ellos. Por todos. En mi nombre, no" este sábado se alzó una única voz en contra de la negociación del Gobierno con ETA. El recorrido estuvo dominado por un mar de banderas de España.

L D (Europa Press) El consejero de Justicia e Interior de Madrid, Alfredo Prada, señaló a Europa Press que las cifras trasmitidas por parte de la Delegación del Gobierno "son una falta de respeto y una burla de gran calibre". Para Prada, el delegado del Gobierno "ha incurrido en la irresponsabilidad del ejercicio de sus funciones al propiciar insultos y descalificaciones hacia el Ejecutivo de la Comunidad de Madrid".

Prada insistió en que "esta burla no es asumible", por lo que insistió en la necesidad de que dimita el delegado del Gobierno por su actitud durante la manifestación.
El número dos del Gobierno regional aclaró que mantiene la cifra de asistentes, calculada en 1.400.000 personas. Prada explicó que esta cifra es "moderada" en comparación con la estimada por la AVT y precisó que el cálculo es fruto de una estudio exhaustivo. "Ahí están las imágenes y las fotografías que demuestran la realidad de esta manifestación, donde se convocaron cientos de miles de personas", sentenció el consejero.


MULTITUDINARIO APOYO A LAS VÍCTIMAS DEL TERRORISMO
Más de 1.400.000 personas desafían al frío y la lluvia para decir no a la negociación con ETA
La respuesta a la convocatoria de la AVT ha superado todas las expectativas. La Comunidad de Madrid cifra en 1.400.000 las personas que han secundado la manifestación en una fría tarde en la que el recorrido de la marcha ha estado dominado por las banderas de España. Los organizadores calculan que han sido 1.750.000 los manifestantes mientras que la Delegación del Gobierno rebaja esa cifra hasta los 110.000 asistentes. El Ejecutivo regional ha pedido la dimisión del delegado, Constantino Méndez, por esta "burla". Bajo el lema "Por ellos. Por todos. En mi nombre, no" se ha alzado una única voz en contra de la negociación del Gobierno con ETA.

(Libertad Digital) Miles de personas se concentraban desde primera hora de la tarde de este sábado en las inmediaciones de la plaza de la República Argentina de Madrid. En ese punto estaba prevista la salida de la cabecera de la manifestación de la AVT para las cinco y media de la tarde. Sin embargo, la masiva afluencia de manifestantes retrasó el inicio de la protesta en contra de la negociación del Gobierno con ETA. Transcurrida una hora, la Consejería de Justicia de la Comunidad de Madrid facilitó una primera estimación de participantes en torno a 1.400.000 personas, según datos del consejero Alfredo Prada en la COPE.Los manifestantes, en su mayoría adultos, llevaban numerosas banderas de España y coreaban algunos lemas, entre los que destacaba el de "Zapatero, embustero". También portaban pancartas con distintos mensajes, muchos ellos alusivos al presidente del Gobierno y en contra de la negociación con ETA.Muchos de los asistentes han denunciado la actitud de la Policía Nacional, que poco después de las 17 horas cortó el acceso a parte de la calle Serrano, por la que discurre la marcha. Sin explicación alguna, y únicamente argumentando que eran órdenes de Protección Civil, finalmente abrieron el acceso media hora después.
Entre las consignas más repetidas en las pancartas figuraban frases como: "Memoria, dignidad y justicia, por las víctimas del terrorismo", "Zapatero no traiciones a las víctimas", "Paz sin libertad = fraude" y otra en la que se podía leer: "¿Qué es Zapatero? ¿Es acaso un traidor amigo de los terroristas o quizá un amoral embustero?", "¿Piensas partir España?En las inmediaciones del recorrido se colocaron varios puestos de venta de banderas de España y además había varias personas que recogían firmas para la iniciativa del PP de solicitar un referéndum sobre la reforma del Estatuto de Cataluña. Un helicóptero de la policía sobrevoló la zona donde había desplegadas varias dotaciones de policía, ambulancias del SAMUR y coches del servicio de limpieza del Ayuntamiento de Madrid.
La manifestación, que discurrió por la calle de Serrano hasta la plaza de Colón, contó con dos cabeceras. La primera de ellas con los dirigentes de la AVT, incluido su presidente, Francisco José Alcaraz, portaba una gran pancarta con el lema de la marcha: "Por ellos, por todos. En mi nombre no". Delante de esta cabecera principal, varias víctimas en sillas de ruedas fueron recibidas al grito de "No estáis solos" por parte de los manifestantes, que corearon también lemas relativos a los presos de ETA: "No son presos, son asesinos" o dirigidos al presidente del Gobierno: "Zapatero, embustero".Unos metros más atrás, en una segunda cabecera, se encontraban políticos como la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre; el alcalde de la capital, Alberto Ruiz Gallardón; el presidente del PP, Mariano Rajoy; o el secretario general del PP, Ángel Acebes.En un programa especial que dirigió Federico Jiménez Losantos en la COPE, el presidente de la AVT, Francisco José Alcaraz, explicó que "como víctimas nos sentimos bastante reconfortados. Estamos muy emocionados porque vemos que las victimas no estamos solos como pretendía dejarnos el Gobierno".
En los mismos micrófonos, el secretario general del PP, Ángel Acebes, se felicitó porque "es muy emocionante lo que se está viviendo en Madrid". También Aznar pidió al Gobierno que escuche el mensaje que están dejando las víctimas en esta manifestación para que no se negocie con los terroristas. "Con las víctimas siempre hay que estar. Sin ellas es la derrota segura", apuntó el ex presidente.
La marcha concluyó con un minuto de silencio en memoria de las víctimas y el manifiesto que leyó Alcaraz. (Ampliación)

¿Dónde estaban las televisiones?
Juan Carlos Girauta

Que sigan así, y la inexistente realidad pasará por encima de ellos, de su solipsismo, de su agit-prop y de su administración partidaria de la verdad

Si una televisión pública no cubre una manifestación de un millón de personas en la capital, esa televisión es una porquería en términos periodísticos, un mero brazo propagandístico del Gobierno en términos políticos y un ente dedicado a la censura. El futuro que merece pasa por la clausura o por la venta, a ser posible a pedazos. Si una televisión privada incurre en el mismo error inconcebible, será muy libre de hacerlo, pero se retrata.

El canal que el trece de marzo del año pasado consideró necesario enviar cámaras y comentaristas —y mantener una conexión permanente con la calle Génova— porque unos centenares de personas se echaron a la calle, consiguiendo con su cobertura que los centenares pronto fueran miles, ha ignorado la marea humana de este sábado. Confían en esas supersticiones posmodernas acerca de los medios como conformadores de la realidad, trasunto del relativismo cognitivo, o directamente del solipsismo, que reputa que la realidad exterior no existe; que cree, en serio, que depende de nuestras percepciones. Que sigan así, y la inexistente realidad pasará por encima de ellos, de su solipsismo, de su agit-prop y de su administración partidaria de la verdad.

Parece que la televisión autonómica de Madrid sí se ha ocupado de la insignificancia, de la casual presencia de un millón de ciudadanos en las calles. Suerte que tienen. En Barcelona, yo cambiaba y cambiaba de canal, y nada. Algo me dice que hubiera bastado un pequeño altercado, una riña, unos golpes, para que todos esos medios audiovisuales consagrados a conformar la realidad a su medida se echaran a la calle en busca de las pruebas definitivas de la infamia que vienen esparciendo: el carácter abrupto, incontrolado y fascistoide de las víctimas del terrorismo y de quienes los apoyan más allá de la retórica.
¿Dónde estaban las televisiones? En la Primera salía Alfredo Landa en calzoncillos. Lo más parecido al franquismo de los sesenta es el concepto de libertad de los que hoy manejan los resortes del poder gracias, entre otras falsedades, a su discurso neoantifranquista. Ha vuelto la censura, esta vez sin complejos.

Un millón casi: faltaba el PSOE
Federico Jiménez Losantos

Zapatero y Polanco (su aliado fundamental, sin el que todo el tinglado se vendría abajo) siguen decididos a pactar con la ETA y contra el PP

Ni los más optimistas entre los convocantes de la manifestación, la AVT, soñaban con reunir una multitud tan gigantesca como la congregada en Madrid en respaldo a las víctimas del terrorismo y en rechazo a la política gubernamental de negociación con la ETA. Ni los más optimistas dentro del PP pensaban que su apuesta por la política de firmeza frente a la banda criminal y contra sus aliados tácitos o expresos, entre los que figuran los separatistas de toda la vida, los comunistas de casi siempre y los socialistas de ahora mismo, iba a tener, en una tarde madrileña de fin de semana y calor agobiante, un éxito de convocatoria tan abrumador. Por supuesto, la manifestación tendría el mismo valor si hubiera reunido a veinte mil personas, porque lo que defendía es moralmente impecable y políticamente razonable. Pero reunir a cerca de un millón de personas con el Gobierno y toda su batahola mediática en contra no supone sólo un extraordinario respaldo social e ideológico a la AVT sino que muestra la solidez y la amplitud del rechazo que en la sociedad española despierta la política de pacto con la ETA y sus cómplices de Perpiñán o Estella, y, en consecuencia, contra las víctimas y contra el PP.

Si el siniestro Peces Barba, la patética Pilar Manjón y este Gobierno de extrema izquierda que padecemos tuvieran el más elemental sentido de la dignidad, dimitirían de su cargo, dejarían de traicionar a las demás víctimas o abandonarían su cobarde política de claudicación ante el terrorismo y el separatismo. No lo harán, porque siguen el guión necio y criminal de quienes piensan que se puede volver la espalda a media España para que los terroristas de ETA les permitan tener más Poder por más tiempo. Estúpidos. Ni la ETA va a hacerles el trabajo limpio —lo suyo siempre será el trabajo sucio—, ni media España va a resignarse a seguir borreguilmente las consignas de la SER y el Pirulí. Parodiando a Churchill, puede decirse que han elegido la indignidad para mantener su comodidad. Ya chapotean en la indignidad pero no tendrán comodidad... ni dignidad.
Ahora bien, no cabe engañarse: Zapatero y Polanco (su aliado fundamental, sin el que todo el tinglado se vendría abajo) siguen decididos a pactar con la ETA y contra el PP. Para ello, proseguirán su abyecta labor de dividir, calumniar y deslegitimar a las víctimas del terrorismo y a todo lo que representan. No lo conseguirán, pero seguirán intentándolo con toda la malicia, la artería y fiereza totalitaria tantas veces demostradas. Por todo ello, esta del sábado 4 de junio de 2005 debería ser sólo la primera de muchas manifestaciones que han de recuperar la calle para todos los españoles dispuestos a derrotar a la ETA, no a congraciarse con ella, que son la inmensa mayoría, como se ha visto en Madrid. Casi un millón de personas. Con el PSOE, hubiera habido un millón. Pero como se ha puesto contra las víctimas y contra el PP, es evidente que la manifestación ha sido también contra Zapatero. A cambio de su ausencia, y de esa negociación que supone traicionar a la libertad y a España, el inquilino monclovita tiene ya en su haber un símbolo que ningún presidente del Gobierno en la democracia ha merecido: “zETAp”. Si tiene un mínimo de capacidad intelectual, reflexionará.


EL PRÓXIMO 4 DE JUNIO, EN MADRID
Méndez declara de "alto riesgo" la marcha convocada por las víctimas del terrorismo
Mikel Buesa, hermano del socialista asesinado por ETA Fernando Buesa, ha denunciado en la COPE que la delegación del Gobierno "está haciendo todo lo posible para que la manifestación no se organice adecuadamente". Están poniendo dificultades al trayecto, a la formación de cabeceras, se obliga a aparcar los autobuses lejos del lugar de la marcha y hasta se obliga a identificarse a los asistentes. El Foro de Ermua ha advertido a Constantino Méndez que no le van a tolerar esta medidas "dictatoriales". Mientras, el delegado declara la marcha de "alto riesgo".

(Libertad Digital) El vicepresidente del Foro de Ermua, Mikel Buesa, ha dicho en La Mañana de la Cadena COPE que "es probable que la consigna de Rubalcaba sea que no se hable de la manifestación" convocada por las víctimas del terrorismo para el próximo 4 de junio, pero alertó que "por detrás se está haciendo todo lo posible para que la manifestación no se organice adecuadamente".

En concreto, Buesa denunció las "dificultades" que está poniendo el delegado del Gobierno en Madrid, Constantino Méndez para que la marcha se desarrolle con normalidad. "Dificultades en cuanto al trayecto, a la formación de las cabeceras, pero lo que más llama la atención es la predisposición de la Delegación del Gobierno a aparcar los más de 300 autobuses que ya han confirmado que vienen a Madrid muy lejos del lugar de la manifestación", relató Buesa, que reconoció que no sabe si Méndez "quiere vengarse" (conviene recordar que las detenciones ilegales perpetradas a raíz de la última marcha de la AVT pueden costarle el puesto al delegado del Gobierno). Méndez ha decidido declarar la movilización de "alto riesgo".
El hermano del socialista asesinado Fernando Buesa ha informado de que el delegado del Gobierno "está tomando medidas de un estado policial, pretende que los autobuses sean detenidos e identificados antes de entrar en Madrid y que lleven algún tipo de autorización del Gobierno como si en España no tuviéramos libertad de movimientos". Buesa quiso llamar la atención sobre "este tipo de medidas autoritarias propias de un estado dictatorial" y advirtió al delegado del Gobierno de que "no se las va a tolerar".


CLAMOR POPULAR EN LAS CALLES DE MADRID
Cerca de un millón de personas contra la negociación con ETA
Manos blancas, banderas de España y de todas las comunidades autónomas, gritos de "Zapatero, acércate al PP" y peticiones de dimisión para Peces Barba marcaron la masiva concentración. "Constitución, no negociación" fue una de las consignas más repetidas. Mientras que la AVT cifró en cerca de un millón el número de participantes, la Delegación del Gobierno de Constantino Méndez rebajó el dato hasta los 240.000. Vea aquí el ALBUM DE FOTOS de la marcha.


(Libertad Digital) Desde mucho antes de las seis de la tarde, hora oficial del arranque de la marcha, miles y miles de personas se habían reunido en las inmediaciones de la madrileña glorieta de López de Hoyos, lugar donde la banda terrorista ETA asesinó a siete personas en 1993. Convocadas por la AVT, y tras las pancartas "Por ellos, por todos. Negociación en mi nombre NO", "Libertad por dignidad" y "Comprometidos con las víctimas", marchaban para mostrar su rechazo a una negociación del Gobierno con los etarras. Entre las consignas más repetidas, "Se nota se siente, Ermua está presente", "No les olvidamos, no negociamos", "Constitución, no negociación". Cuando la marcha pasó por el Parque Automovilístico de la Guardia Civil, en la calle de Príncipe de Vergara semiesquina con Concha Espina, objetivo también de ETA, los asistentes rompieron en una gran ovación y gritos de "Guardia Civil, gracias" y "Vuestros muertos no se olvidan".
La manifestación estaba compuesta por tres cabeceras, la primera de las cuales, estaba formada por las víctimas con el lema "Por ellos. Por todos. Negociación en mi nombre ¡No!", la segunda por los políticos del PP con una pancarta con la leyenda "Libertad con Dignidad" y en tercer lugar se situaba la cabecera de las plataformas ciudadanas con el lema "Colectivos cívicos. Por la libertad, no a la negociación".
La manifestación comenzó oficialmente en torno a las 18.15 horas cuando se empezó a mover la cabecera de las víctimas, encabezada por el presidente de la Asociación Víctimas del Terrorismo, Francisco José Alcaraz; Irene Villa y su madre; María del Mar Blanco, hermana del concejal de Ermua Miguel Ángel Blanco, y Laura Jiménez, una víctima de los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid.


A esta cabecera, reservada a las víctimas, se sumó también la responsable de inmigración de la Comunidad de Madrid y profesora de la Universidad del País Vasco, Gotzone Mora, del PSE-EE, quien fue recibida con aplausos por los asistentes a la marcha. Entre las primeras consignas que correaron los manifestantes congregados en torno a esta primera pancarta se pudo oír "Peces-Barba, dimisión" y "No son presos, son asesinos".

La cabecera de políticos salió de la Plaza de Cataluña bajo el lema "Libertad con dignidad". El ex presidente del Gobierno y presidente de las Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES), José María Aznar, llegó acompañado por su mujer, Ana Botella, y fue recibido por los asistentes entre gritos de "valiente, valiente" y "presidente, presidente", al tiempo que coreaban "Zapatero embustero".

Tras realizar un recorrido por las cabeceras que presiden la manifestación, Aznar llegó a la segunda cabecera en la que estaban otros miembros de su partido como Esperanza Aguirre y Ángel Acebes.

Minutos antes, había llegado el presidente del PP, Mariano Rajoy, que fue recibido también al grito de "presidente, presidente". La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, fue una de las primeras en llegar a esta marcha que fue recibida con aplausos y gritos de "valiente, valiente", junto con el secretario general del PP, Ángel Acebes, al grito de "ministro, ministro".

También estaban los portavoces del PP en el Congreso y Senado, Eduardo Zaplana y Pío García Escudero, respectivamente, el consejero de Presidencia de la Comunidad de Madrid, Jesús Pedroche, los ex ministros del PP Elvira Rodríguez y Miguel Arias Cañete, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá y el presidente de la Generalidad Valenciana, Francisco Camps, la presidenta del PP vasco, María San Gil, su antecesor en el cargo, Carlos Iturgaiz, y el diputado general de Guipúzcoa, Román Sodupe.

Al comienzo de la marcha, en la calle del Príncipe de Vergara esquina con López de Hoyos, se realizó una ofrenda floral para homenajear a las siete personas, cinco militares y dos civiles, que cerca de este lugar fueron asesinadas por ETA el 21 de junio de 1993.

A continuación, la marcha prosiguió hasta la Plaza de la República Dominicana donde se celebró otro acto de recuerdo a los 12 guardias civiles que resultaron asesinados en dicho lugar el 14 de julio de 1986.

Pasadas las seis de la tarde, hora prevista para el inicio de la manifestación, todavía eran muchos los ciudadanos que intentaban llegar al lugar de arranque de la convocatoria. Por ejemplo, en la estación de metro de Avenida de América, la afluencia de gente impedía salir a la superficie con normalidad y algunos de los usuarios empleaban hasta un cuarto de hora en lograrlo.

Al final de la manifestación, los encargados de leer el manifiesto fueron el presidente de la AVT, Francisco José Alcaraz, y la periodista Isabel San Sebastián.


PEDÍAN CONOCER LA VERDAD SOBRE EL 11-M
Manifestación espontánea frente a la SER: "Grupo Prisa, España no se pisa"
Al término de la manifestación convocada por la AVT, de la que el ministro de Defensa tuvo que irse por ser increpado, casi un millar de personas se dirigieron desde la Puerta del Sol a la sede de la Cadena SER, en la vecina calle Gran Vía.

L D (Europa Press) Los congregados, que se contaban a cientos, se concentraron frente al número 32 de la madrileña calle Gran Vía, donde, además de la Cadena SER, se encuentra la sede de otros medios pertenecientes al Grupo Prisa. Allí han gritado algunos insultos y lemas como "Polanco, cabrón somos un montón", "¿Dónde están los cabrones de la SER?" y "Grupo PRISA, España no se pisa".

La manifestantes espontáneos, repetían "Hemos venido sin menasjes", también lanzaron proclamas solicitando conocer la verdad sobre el 11-M y en contra de la manipulación. Al igual que durante la manifestación de la AVT, corearon "No, no, no, Acebes no mintió". La Policía tuvo que cortar el tráfico en ambos sentidos en esta vía del centro de la capital.

Condena de la AVT

El presidente de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, Francisco José Alcaraz, manifestó su "total condena" ante esta concentración frente a la Ser . Francisco José Alcaraz, en declaracioens a Europa Press, expresó su "condena ante agresiones a cualquier medio de comunicación" que, según aseguró, "responden a cualquier interés, pero no al de las víctimas".

En la misma línea, rechazó la actitud de algunos manifestantes con Bono, a quien destacó como "una persona que está siempre con las víctimas del terrorismo". Alcaraz mostró por todo ello la "indignación y decepción" de la AVT ante la postura de personas que, según reiteró, no encajan "con el sentir de las víctimas ni de los asistentes a la manifestación".

No obstante, Alcaraz garantizó que estos dos incidentes no deslucieron el éxito de la convocatoria de la Asociación. "Lo más importante es que el sentir de todos los manifestantes estaba con las víctimas", subrayó, antes de agradecer el apoyo recibido tanto de los políticos como de todos los asistentes a la marcha.

Don Tartufo Peces, indigno del cargo
Federico Jiménez Losantos

Es obvio que el oblicuo Peces no quiere respaldar a las víctimas de ETA para no estorbar la operación de imagen del Gobierno, que pretende conseguir una tregua electoralmente rentable cediendo ante el separatismo y negociando con los etarras.

Que la manipulación de las víctimas del 11M a través del testimonio de Pilar Manjón iba a desembocar en la deslegitimación de las víctimas del terrorismo etarra era algo previsible. Que la cobertura institucional buscada para esa manipulación fuera la de un Alto Comisionado para las Víctimas del Terrorismo permitía entrever las prisas del Gobierno para controlar a miles de familias que fueron tratadas dignamente por primera vez por el PP. Y que fuera Gregorio Peces Barba el elegido para esa operación garantizaba tanto el sectarismo como la estupidez en su ejercicio. Las previsiones se han cumplido. A la manifestación convocada por la AVT no irá Pilar Manjón –seguramente no se le permitiría llamar asesino a Aznar ni pintarse las manos de rojo– y se ha negado públicamente a ir Peces Barba, porque su altísima compasión sólo está dispuesta a manifestarse si hay nuevas víctimas. Se ve que las usadas no le motivan. Peces Barba debe de ser una fashion victim como Carmen Calvo, pero en siniestro.

El PP, único partido que realmente se ha preocupado por las víctimas del terrorismo en los años del Gobierno Aznar, debe pedir la inmediata dimisión de este sujeto, evidentemente incapaz de entender que una víctima del terrorismo no deja de serlo porque pasen los años o reciba una pensión. Es obvio que el oblicuo Peces no quiere respaldar a las víctimas de ETA para no estorbar la operación de imagen del Gobierno, que pretende conseguir una tregua electoralmente rentable cediendo ante el separatismo y negociando con los etarras. Peces ha ofendido a las víctimas del terrorismo, las vivas y las muertas, que durante muchos años han sido una reserva de dignidad nacional frente al envilecimiento del Gobierno del GAL y del saqueo del Ministerio del Interior, el Gobierno de Vera, de Paesa y de Roldán, el Gobierno que se negaba a dar subvenciones a las víctimas del terrorismo pero no a los amigachos de los sandinistas, el Gobierno del partido de Peces que, por desgracia, ha vuelto al poder. Y con él, las humillaciones a las víctimas del terrorismo. No tienen por qué aguantarlas. Que Peces se vaya a su casa, de donde nunca debió salir para combatir el terrorismo, porque ni quiere ni puede ni sabe hacerlo. Váyase a paseo y váyase lejos, don Tartufo.
CON LOS ASESINOS NO SE NEGOCIA"
Bono abandona la manifestación de la AVT en medio de abucheos y gritos de "fuera"
La notoria ausencia de Peces Barba convirtió la manifestación de apoyo a la AVT en un acto de reproche al Alto Comisionado. También al Ejecutivo, que sólo estuvo representado por Jordi Sevilla. Otro ministro, José Bono, acudió alejado de la pancarta que portaban los representantes políticos. Abandonó la marcha antes de finalizar tras ser increpado durante el recorrido. "¿Dónde está Zapatero?" y "No a la negociación con ETA" fueron los gritos más coreados. Los manifestantes echaron en falta a Javier Bardem.

L D (Agencias) Otra de las consignas más coreadas por los miles de asistentes a la manifestación de este sábado en Madrid, treinta y cinco mil según la Policía, fue "PNV engaña, Euskadi es España". Además, los manifestantes no dejaron de preguntarse por la ausencia del presidente del Gobierno y de Peces Barba, el Alto Comisionado de Apoyo a las Víctimas, cuya dimisión reclamaron.Desde antes de las cinco de la tarde, varios miles de personas se concentraron en la calle de Alcalá en respuesta a la convocatoria de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, cuyo lema era "Memoria, dignidad y justicia con las víctimas" y cuyo recorrido transcurrió desde la plaza de Cibeles a la Puerta del Sol.
"Zapatero donde estás", "No a Zapatero el 20 de febrero" y "Peces Barba donde éstas", fueron algunos de los gritos que coreaban los manifestantes, que también se preguntaron por la ausencia en la manifestación del actor Javier Bardem, al que recriminaron que durante el Gobierno del PP no faltara a otras protestas contra la guerra de Irak o por el "Prestige". Además, pidieron que los asesinados no sean "moneda de cambio" en ninguna negociación con ETA. Bono, el más abucheado, dejó antes de tiempo la manifestación

El Gobierno había confirmado que sólo el ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, acudiría en representación del gabinete. Era uno de los políticos que portaban la pancarta "Comprometidos con las víctimas del terrorismo". Junto a él marchó el secretario general del PP, Ángel Acebes, el secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, su antecesor en el cargo, el popular Ignacio Astarloa, la presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, el alcalde, Ruiz Gallardón, y el líder de los socialistas madrileños, Rafael Simancas. Las críticas a Sevilla se entremezclaron con los gritos a favor de Acebes. Al primero le dedicaron: "A qué vienes aquí, Sevilla"; al segundo: "No, no, no, Acebes no mintió".

Al margen de todos ellos, participó en la manifestación José Bono, acompañado de su familia y la europarlamentaria socialista Rosa Díez. Sin embargo, el ministro de Defensa no completó todo el recorrido de la marcha. Increpado continuamente por un grupo de manifestantes, al grito de "fuera, fuera" y reprochándole las ausencias de Peces Barba y Zapatero, decidió abandonar la concentración rodeado por sus escoltas antes de llegar a la Puerta del Sol. Alguno de los concentrados intentó agredirle.

En declaraciones a RNE, el ministro explicó que "lamentablemente me he encontrado en la manifestación con gente que no son amantes de la libertad y eso me produce tristeza". Antes de este episodio, y ante las críticas al Gobierno por parte de los manifestantes, Esperanza Aguirre fue la primera en reaccionar: "Aquí no hay más responsables que los asesinos y los terroristas", dijo a la prensa.

¿Dónde está Bardem?
Los gritos contra Bono no fueron los únicos. Desde el principio de la manifestación se escucharon críticas contra el resto de dirigentes socialistas, especialmente contra el presidente del Gobierno, al que reprocharon al grito de "vago, vago" su ausencia. Contrastaban con las voces a favor del ex ministro Ángel Acebes. Las preguntas también se dirigieron hacia el actor Javier Bardem, "dónde está el titiritero Bardem", y hacia Pedro Almodovar; a gritos, muchos asistentes le echaron en falta.

La portavoz de la Asociación de Víctimas del 11-M, Pilar Manjón, también fue cuestionada por su ausencia. La asociación se reunió de urgencia para condenar los hechos. A través de un comunciado, su presidente, Jesús Ramírez, aprovechó para denunciar que se ha usado políticamente la manifestación y que no secundó la convocatoria porque "no se nos solicitó que participásemos en su preparación, para ese fin y mensaje" (condenar enérgicamente el terrorismo). "Se ha intentado utilizar políticamente esta manifestación, por lo que no vamos a estar ni en esa ni en ninguna".
Numerosas personas mostraron camisetas negras con el lema de la manifestación "Memoria, dignidad y justicia con las víctimas" y debajo la frase "Todos contra ETA".

Investigación de la Policía

La Policía Nacional ha abierto una investigación para tratar de aclarar algunos hechos sucedidos durante la manifestación "ante la posibilidad de que pudieran ser constitutivos de delito".

Fuentes policiales apuntaron que el objetivo es "depurar responsabilidades si las hubiera". Se van a analizar los vídeos existentes de la manifestación para tratar de tomar declaración a las personas que pudieran haber participado en estos hechos. La nota policial concreta que "se han producido alteraciones del orden público, así como un intento de agresión al ministro de Defensa, José Bono".

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