Unió y la libertad

miercoles 26 de julio de 2006
Corrupción
Unió y la libertad
Juan Carlos Girauta

¿Por qué un chiringuito supuestamente dedicado a promover el comercio catalán recibe subvenciones para formación de parados y para estudios jurídicos? ¿Será porque Unió, además de la conselleria de Comercio y Turismo, ostentaba las de Trabajo y Justicia?

Sería interesante que Unió Democràtica de Catalunya aclarara si el ciudadano de origen sirio que han decidido incluir en las listas por Barcelona es el mismo que afirmó en 2003 que “toda la política del gobierno Bush en Oriente Próximo está ligada a los intereses de Israel en la zona. Lo primero es ocultar las atrocidades que Sharon está cometiendo contra los palestinos en esta Intifada”.
Más que nada para que los moderados nacionalistas de la burguesía catalanista tengan claro que cuando votan a la coalición de la centralidad y la gobernabilidad lo hacen también al autor de estas memorables frases: “Siria siempre ha sido partidaria de una paz justa en Israel”. “Para Washington el gobierno sirio es una piedra en el zapato, y quiere que el presidente Bashar el Asad baje la cabeza y firme la paz al estilo judío”. “El gobierno del presidente El Asad emprendió hace tiempo un proceso de democratización que ha dado muy buenos resultados. Siria es un país donde hay libertad en todos los terrenos”.
Si lo de Siria es “libertad en todos los terrenos”, empiezan a cuadrar las cosas. Uno empieza a entender el sentido que le dan a las palabras los hombres de Duran i Lleida, el que llamó “mercenarios” a los colaboradores de la COPE y asumió como reto personal el linchamiento y cierre de la emisora. La libertad de algunos democristianos es tan amplia y laxa que incluye la opción de pegarle un mordisco anual al presupuesto de cada departamento gubernamental que les toca (que les tocaba y que les tocará) en su tradicional y leonino contrato de reparto con Convergència.
Tengo delante una resma provista por el departamento de Presidencia de la Generalidad donde se da cuenta de las subvenciones recibidas por la entidad de Unió llamada Fundació Empresa Catalunya, Europa i Amèrica. Pienso en las ventajas de que España –o Espanya– se haya caído del nombre, toda vez que esa cosa fundacional y trasatlántica se ha llevado incontables partidas de formación ocupacional (cometido para el que no tenían ni la capacidad ni los recursos). Por encargarles, hasta les encargaron estudios jurídicos, incluyendo uno que podría ser premonitorio: Estudi dels drets humans i d’empresonament (Estudio de los derechos humanos y de encarcelamiento). Que sí, Duran, que sí: su número de expediente es el 19940100015, ¿vale?¿Por qué un chiringuito supuestamente dedicado a promover el comercio catalán allende las fronteras españolas recibe subvenciones para la formación de parados y para estudios jurídicos? ¿Será porque Unió, además de la conselleria de Comercio y Turismo, ostentaba las de Trabajo y Justicia? No seamos mal pensados. Los de Duran trabajan por la libertad. Una “libertad en todos los terrenos”; como la de Siria, pero con barretina.

Gentileza de LD