lunes, octubre 17, 2011

Alfonso Merlos, El PSOE y la teoría del hueso del jamón

lunes 17 de octubre de 2011

El PSOE y la teoría del hueso del jamón

Alfonso Merlos (elsemanaldigital.com)

U N PSOE dividido, debilitado y vapuleado el 20N no tendrá otra salida digna que la de replegarse, reorganizarse y refundarse renunciando a la bronca y al sectarismo. ¿Lo hará?

Me lo planteaba literalmente así hace unos días un diputado del Partido Popular: "Nos vamos a repartir 305 diputados. Y 45 para CiU y los demás. No creo que lleguemos a los 200 por muy mal que lo haga Rubalcaba, que lo está haciendo, porque para eso el PSOE se tendría que ir a los 100… y… pufff!".

Equivocado o no ese pronóstico sin pretensiones científicas, equivocada o no la proyección demoscópica que en prensa está llegando al conjunto de la opinión pública semana a semana, están empezando a cristalizar varias ideas en relación al momento de precampaña electoral que atravesamos.

La primera: queda muuuucho todavía para las elecciones, y pasarán muchas cosas todavía, sean o no determinantes. La segunda: la tendencia va llevar al PSOE a seguir desplomándose y al PP a repuntar ligeramente. La tercera: ya no hay ´cisne negro´ que valga para ayudar a la izquierda a salvar los muebles, ni siquiera la trampa del final de ETA. La cuarta, y como colofón: los socialistas se van a quedar en los huesos, en el chasis; o en términos planteados por Martín Beaumont, ya hace un par de meses en el debate político de 13TV, Zapatero deja a su gente peleándose por el mismísimo hueso del jamón. No hay carne a la que morder.

En efecto, el espectáculo de falsa democracia interna que hemos dejado atrás este fin de semana con motivo de la composición, definición y cierre de listas certifica que en el PSOE hay más miedo que hambre. Habrá un suelo pírrico de votos, habrá un encargo muy muy justito de los españoles a los señores de Ferraz para que les representen, y por lo tanto se terminó la fiesta y la alegría. Principalmente, porque los españoles han detectado ocho años después que los señores de Ferraz les representan muy mal: prohibiendo, recaudando y empobreciendo; y esto no puede ser.

El gran interrogante de cara a la noche del 20N y la resaca del 21 no parece ya si el PP se hará o no con una victoria abrumadora, sino más bien cuál será el camino del PSOE. Y cada día que pasa cuaja con más consistencia la tesis de un partido que se verá empujado por los ciudadanos hasta sus cuarteles de invierno para reflexionar y para replantear su relación con los representados, le duela lo que le duela a los integrantes del comité electoral de Rubalcaba, incluido el valioso Pedro Sánchez.

Porque millones de representados han terminado cabreados, abrasados, incluso asqueados. Y porque quienes no tienen carné, ni se entusiasman con la política, ni desarrollan especiales filias o simpatías hacia ningún candidato ni partido (que por cierto son millones de compatriotas), parecen convencerse de que este país necesita un gobierno de mayoría absoluta de Mariano Rajoy. Pero de eso hablaremos la semana que viene.

http://www.vistazoalaprensa.com/contraportada.asp?Id=2819

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