martes 24 de junio de 2008
Otro tono, mismas políticas
Rodríguez Zapatero debe de creer que basta con pedir perdón por haberse equivocado para que la economía recupere la senda de crecimiento sostenido. Al menos eso parece deducirse de la esperada presentación ayer de su «Informe Económico», con el que reconoce por primera vez las serias dificultades por las que atraviesa la economía española, vuelve a culpabilizar a terceros y no presenta novedad alguna para suavizar el ajuste y posibilitar la recuperación del dinamismo. Una nueva oportunidad perdida. Zapatero concede gran importancia a un informe anual -copia propagandística del que en Estados Unidos se realiza ante las Cámaras- que el año pasado recibió sonoras críticas por su tono triunfalista, al negar las evidencias del cambio de ciclo, y esta vez ha decidido aprovecharlo para congraciarse con la opinión pública y compartir sus dificultades. Zapatero reconoce ya que las propias estimaciones oficiales de hace una mes son excesivamente optimistas y que creceremos por debajo del 2 por ciento, aunque evita mencionar el impacto en el desempleo. Pero niega, contra toda evidencia, que podamos entrar en un estancamiento duradero. Con ese diagnóstico todavía sesgado enumera sus propuestas y vuelve a defraudar con más activismo, buena voluntad y una repetición de planes conocidos. Sólo un cambio de tono y un cierto ajuste en el gasto corriente del Estado -reducción de la oferta pública de empleo y congelación del sueldo de los altos cargos-, que presentó exageradamente como un plan de austeridad.
Si el diagnóstico sigue incidiendo en el carácter importado y transitorio de la crisis, no puede sorprender que las propuestas sean poco ambiciosas e insuficientes. No serán el Plan VIVE -versión ecológica y limitada del Plan Renove de automóviles- ni las nuevas facilidades financieras para la construcción de viviendas de protección oficial, ni la participación de las Comunidades Autónomas en la gestión de aeropuertos -una nueva restricción a la iniciativa privada y un paso adelante en la creación de un sector público autonómico- los que provoquen ese cambio de modelo. Más criticable es aún la voluntad de utilizar el ICO como agencia financiera del Estado para subsidiar determinadas políticas de apoyo a la pequeña y mediana empresa sin crearse problemas de competencia en Europa por el abuso de ayudas públicas y disimular, además, su impacto en las cuentas públicas. El presidente se mostró contumaz en la aplicación de políticas discrecionales que priman el clientelismo y la dependencia. Con lo fácil que sería reducir el tipo impositivo sobre el beneficio de sociedades, como le piden todos los organismos empresariales y los partidos políticos del centro-derecha. Zapatero avanzó la reforma de la Formación Profesional reglada y no reglada, objetivo adecuado y ambicioso que pondrá a prueba el diálogo social y la voluntad de consenso con la oposición. La necesidad de fomentar la movilidad funcional y geográfica de la mano de obra es destacada por todos los organismos internacionales y todos los expertos en la materia, pero choca de raíz con poderosos intereses creados y con las competencias autonómicas. Hará falta decisión política porque significa tocar una fuente básica de financiación de los agentes sociales y renegociar la distribución competencial. Sin hacerlo así, la reforma se quedará una vez más en un loable objetivo.
El presidente perdió ayer una nueva oportunidad para demostrar que conoce los problemas de los ciudadanos y que sabe cómo ponerles solución. Superar la crisis exigirá algo más que buenas palabras y promesas de mantener los derechos de los trabajadores. Convendría que el equipo económico escuchase al gobernador del Banco de España, que formó parte hasta hace bien poco de ese mismo equipo. Su diagnóstico es menos optimista, y sus propuestas resultan más ambiciosas, pero precisamente por eso tienen un aire más realista. Si ayer se expusieron todos los planes económicos del Gobierno, la crisis será más larga y dolorosa de lo necesario. Habrá que apuntárselo directamente en el debe del presidente Zapatero.
http://www.abc.es/20080624/opinion-editorial/otro-tono-mismas-politicas_200806240244.html
martes, junio 24, 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario