La nueva maniobra de ZpM forzaria a Rajoy a abandonar el Congreso

CHEQUE EN BLANCO PARA NEGOCIAR CON ETA

La nueva maniobra de Zapatero forzaría a Rajoy a abandonar el Congreso

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El inminente diálogo político entre el PSE y Batasuna, promovido por el presidente, marca un punto de ruptura con la oposición, que La Moncloa querría forzar al máximo y sin vuelta atrás.

2 de junio de 2006. Ha sido la imagen con la que se han quedado los presentes en la recepción con motivo de la inauguración este jueves del nuevo edificio del Congreso. Contemplaban como, en su despedida, el Rey Don Juan Carlos cogía literalmente por la cintura al líder del PP, Mariano Rajoy, y mantenía con él un aparte de varios minutos. Además de lo que el Monarca le pudiera transmitir, le evitó a Rajoy la incómoda situación de tener que despedirse del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. Lo cierto es que, más allá de un saludo protocolario en la visita, los apenas dos metros que separaron a Zapatero y a Rajoy parecían varios kilómetros. El aval del presidente del Gobierno a contactos oficiales del PSE con la ilegalizada Batasuna, ha sido un punto de inflexión en el actual marco de "entendimiento" entre el jefe del Ejecutivo y el líder del partido de la Oposición.A pesar del bofetón propinado a la Ley de Partidos y al Acuerdo por las Libertades y contra el Terrorismo, el jefe del Ejecutivo aún quiere seguir adelante con la escenificación de comunicar al Parlamento el inicio de las negociaciones con ETA. La fecha no está decidida y depende de que el engañado Partido Popular se avenga finalmente a celebrar una reunión del Pacto Anti-ETA, según insisten fuentes de La Moncloa a Elsemanaldigital.com. El propio presidente Zapatero reiteraba su disposición a convocar el Pacto. Si esa reunión no se produce -y Rajoy no tiene la menor intención de servirle en bandeja al Gobierno esa foto-, el jefe del Ejecutivo baraja ahora aprovechar el pleno del próximo martes, día 6 de junio, en el que se discutirán y votarán las resoluciones del Debate sobre el estado de la Nación, para tomar la palabra y exponer su hoja de ruta de las negociaciones con ETA. Las fuentes monclovitas consultadas insisten en que será "una alocución breve, sin que los grupos fijen su posición y sin votación posterior", tal y como ya adelantó nuestro diario días atrás. El objeto sería el de comprometer a toda la Cámara en la cesión a la banda terrorista. De aprobarse este formato, milimétricamente pensado, al Partido Popular no le quedaría más remedio que abandonar el hemiciclo si no quiere verse vinculado con lo que consideran una entrega a la banda. Pero Zapatero, con el inestimable apoyo de sus terminales mediáticas, vendería la definitiva imagen de "un PP que niega la paz a los españoles".