miércoles, octubre 10, 2007

El velo y el antifaz

jueves 11 de octubre de 2007
El velo y el antifaz
Ellos se ponen un velo, y nosotros, un antifaz. Para ser exactos, habría que decir que obligan a sus mujeres e hijas a cubrirse con el velo. Lo nuestro, lo de taparnos los ojos, es voluntario.
No hay peor tonto que el que se engaña a sí mismo, y lo hacemos. Todos los europeos. Enrique Serbeto, con quien compartí hace poco unas jornadas de Periodismo de Altura, cuenta que en Bélgica han retirado de la dieta escolar la suculenta salchicha local. Y no por miedo al colesterol, sino para evitar que se enfaden los musulmanes.
Y en la laica Francia, donde la Asamblea Nacional prohibió en su día la ostentación del velo islámico y otros símbolos religiosos en las escuelas, hay una localidad cuya alcaldesa ha alterado el programa de la piscina municipal, incluyendo horas en las que sólo se admite a mujeres.
Aquí lo último que hemos tenido es lo de Ceuta y ese colegio en Cataluña donde se ha suprimido el cerdo de la dieta. Todo -supuestamente- en aras de la tolerancia y argumentando -como ha hecho la ministra de Educación- que el bien superior es el derecho a la Educación y, por tanto, debe primar sobre el reglamento escolar, donde se prohíbe a los alumnos presentarse en clase con gorra, piercing o velo.
Dice Rajoy que la decisión de la ministra Cabrera sienta «un mal precedente» y tiene razón.
Aquí, en aras del «mestizaje», se carga en masa contra la directora de un colegio si tiene la sensatez de sugerir que las niñas de origen magrebí no asistan a clase embozadas con el hiyab. Si hay que cambiar la dieta y adaptarla al Corán, se cambia, y si lo que cuadra es pedir perdón, para hacer olvidar que los Reyes Católicos conquistaron Granada, a postrarse de hinojos.
Hay que respetar a los demás, pero la integración exige que todos tengamos los mismos deberes.
Hoy es el velo, pero mañana se presentará un padre y exigirá furibundo que su hija no haga gimnasia o que la haga metida en un burka. Y lo tremendo del caso es que la autoridad competente le dejará salirse con la suya.

No hay comentarios: