Victor Llano, Lo que jamas devolverán

lunes 19 de marzo de 20007
Noticias de Cuba
Lo que jamás devolverán
Víctor Llano

La descomunal deuda –nadie nos debe más que los gestores de los lupanares castristas– no impide que nuestro ministro de Asuntos Exteriores presuma del "buen nivel de las relaciones" con la tiranía.

Según informa Carlos Segovia este domingo en el diario El Mundo, la tiranía castrista adeuda a España 1.708 millones de euros (284.000 millones de las antiguas pesetas). Ya sabemos lo que nos debe el máximo líder de los multimillonarios. También que jamás devolverá lo que le sirvió para multiplicar la represión y la patraña. Y lo que es peor, que muy probablemente, un futuro Gobierno democrático se negará a amortizar los préstamos que se pusieron a disposición del tirano cuando éste más los necesitaba.
La descomunal deuda –nadie nos debe más que los gestores de los lupanares castristas– no impide que nuestro ministro de Asuntos Exteriores presuma del "buen nivel de las relaciones" con la tiranía. Sin que aún sepamos por qué, el Gobierno de Zapatero se empeña en amigar con los verdugos y en enfriar los contactos con sus víctimas. Todavía no le han exigido a Castro que revele los datos que guarda en su mochila y con los que amenazó a Trinidad Jiménez cuando ésta osó pedirle que suspendiera los actos de repudio en contra de un ciudadano inocente.Después de 48 años de barbarie, al Gobierno español le constaba que su buenismo respecto a los hermanos Castro sólo lo entenderían éstos como miedo a enfrentarse a ellos; no obstante, trabajó para que Europa les ofreciese todo el tiempo que necesitasen para rectificar. De nada sirvió. Jamás rectificarán. No pueden. Para continuar donde están tienen que multiplicar el sufrimiento ajeno. Con los chantajistas no se puede dialogar. Son insaciables. Como dicen en Cuba, te acaban cogiendo la baja. Más, cuando creen que pueden hacerte daño. Y por lo que parece, pueden. De otro modo no se entiende que Zapatero no le pida a Castro que vacíe la mochila con la que le amenazó.